La pregunta me la lanza de bote-pronto, me agarra como al Tigre de Santa Julia, y todo por un cuestionamiento que le habían hecho en la conferencia de prensa de la mañana y a la que yo no fui…

–¿Cuántas clases de colitas hay?

Mi imaginación me lleva a pensar rápidamente en la cola de borrego, en la cola de zorra y en la dama de ardiente cabellera… ¡me agarró marihuano con la respuesta que le di!

Me tuvo que corregir el Gobernador:

–En la mañana me preguntó mi madrina (Jacy Meza ahí presente) cuándo iban a empezar a mover la colita los funcionarios del Gabinete…

Y de ahí empezó la chunga con las colitas…

II

Me invitan chocolate y tamales… a la gorra no le huyo.

–El Gobernador va a inaugurar las nuevas oficinas de Comunicación Social en el edificio El Olmo…

¿Saben del placer de conducir a 40 ó quizás ya loco, a 60 kilómetros por hora por Lázaro Cárdenas sin que haya vehículo que te aviente la carrocería porque pocos son los que se arriesgan a una fotomulta?

Llego a ese edificio que desde afuera, se ve horrible, como si fuera una fortificación digna de un palacio de terror por unas figuras metálicas que lo cubren en su totalidad. Uno se lo imagina por dentro lúgubre, pero no… hay una claridad increíble y la vista es sorprendente… aún no descifro la “trampa” que hace posible ese efecto donde por fuera, nada se ve de lo que pasa adentro; y por dentro, todo se ve lo que pasa afuera…

Los casi 200 trabajadores de Comunicación Social de Gobierno del Estado ya se concentran en el tercer y cuarto piso, pero la tamaliza y chocolatiza fue en el quinto.

Me encuentro a viejas y viejos amigos que hacía años unos, y meses otros, que no veía porque por alguna razón estaban en diversas áreas de la CGCS como son radio, televisión y prensa… ¿qué? ya no existen esas áreas… bueno, hoy ya hay Monitoreo, Análisis, Información, Vinculación y Difusión.

III

Juan Octavio Pavón está ídem como su apellido… esponjado como un Pavón… bueno, realmente la frase es “esponjado como totol”, pero pues el titular de la Coordinación es de caché.

Por fin, ve realizado su sueño: Trabajar comunicados.

Mi micro-cosmos: Trabajé en un semanario donde yo tenía un cubil, mis formadores uno cada quien; uno de ellos, me estorbaba en el pizarrón donde planeaba cada edición. En otra área, tenía a unos ilustradores; en otra más, a otro caricaturista y una oficina más, a un fotógrafo… en pocas palabras, una instrucción de trabajo tenía que repetirla ¡hasta cuatro veces! Éramos comunicadores incomunicados.

El macro-cosmos de Pavón: Oficinas en Zaragoza, Clavijero, Carrillo Puerto y en Palacio… solicitar ver a un director administrativo, de Análisis, Información u otra área llevaba de 15 a 20 minutos… hoy, será una exageración tres minutos. Los comunicadores dejaron de estar incomunicados.

Por supuesto, ya no hay renta de inmuebles por doquier sino hoy se concentra en un edificio. Haciendo cuentas, hay un ahorro del 10 por ciento. Parece poco, pero en términos de funcionalidad, se va al cien por ciento.

Un ejemplo de ello que ya se venía realizando desde palacio de Gobierno, es en el área de Producción que, desde que está Juan Octavio Pavón, realmente produce… todos los spots de Gobierno del Estado tienen el sello de Gobierno del Estado, es decir, ya no contratan a ninguna empresa… los maloras han de decir: porque como no les pagan, ni quieren que los contraten… como sea, el asunto es que ya hay producción propia.

IV

–¿Cuántas clases de colitas hay?– me retumba en la cabeza la pregunta del Gobernador. Según me dicen que le preguntaron por los funcionarios que no hacen ejercicio… bueno, Erik Porres sé que está bajo un riguroso esquema de ejercicios porque dice que quiere pasar de “Fresa” a “Mamey”… es decir, quiere hacer masa muscular… Víctor Alvarado Martínez, el fatídico “Doctor No”, gusta igual de correr, pero no me refiero de “correr” a los inversionistas que asegura, ocasionarían un impacto ambiental negativo con sus asentamientos… le gustan las carreras a riesgo de hasta besar el suelo de Coatzacoalcos por andar viendo lo que no debe… otro más que hace ejercicio es el Fiscal Luis Ángel Bravo… bueno, también los guaruras que corren al lado de él… ¡Ah! y también Arturo Bermúdez Zurita, aunque él va a gimnasio. Otro que le entra a retar a la báscula, es Juan Antonio Nemi Dib, quien además de perder peso, perdió su gracia… ¡ya no es el mismo! Dicen que Paco Valencia bajó de peso (no lo he visto), si es así, es seguro que ya no regaló los trajes como la anterior vez que adelgazó y en el rebote, pedía a la persona que le regaló pantalones y sacos, que se los devolviera…

Si a eso se refería la pregunta, éstos son los que “mueven la colita”.

smcainito@nullgmail.com