Israel autorizó finalmente la entrada a Jerusalén de varones palestinos mayores de 35 años y mujeres de todas las edades, confirmaron fuentes israelíes y palestinas, pese al cierre oficial declarado en la últimas horas para Gaza y Cisjordania.
El Ejército israelí prohibió a todos los palestinos entrar a Israel, a excepción de personal “casos médicos y humanitarios”, como parte de las estrictas medidas tomadas tras el ataque en Tel Aviv.
Por segundo día consecutivo se mantiene un férreo bloqueo a la localidad palestina de Yatta, en el sur del distrito cisjordano de Hebrón, mientras que anunció el cierre de los pasos en Cisjordania hasta el final de la fiesta judía de las Primicias, el lunes. Una portavoz militar había anticipado que el cierre de la frontera duraría hasta la medianoche del domingo.
El asedio, que comenzó la noche del ataque de dos residentes en dicha ciudad de Tel Aviv, en el que murieron cuatro israelíes, es el más duro que el Ejército impone a una ciudad de Cisjordania en los últimos cinco años, según el servicio de noticias Ynet.
“Refleja un cambio de rumbo desde el punto de vista del Ejército, el servicio secreto Shabak y los servicios de seguridad en general”, escribe hoy el corresponsal militar Ron Ben Yishai, que lo atribuye a la entrada en funciones del nuevo ministro de Defensa, el nacionalista Avigdor Lieberman.
Durante una visita al lugar del atentado, Lieberman advirtió ayer que no pensaba quedarse en las “palabras”, sino permitir al Ejército hacer su trabajo.
ONU denuncia ataque y represalias: derecho internacional prohíbe castigo colectivo
El alto comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad Al Hussein, denunció tanto el ataque terrorista en el que murieron cuatro israelíes y otros seis resultaron heridos en Tel Aviv, como las acciones de represalia adoptadas por el gobierno hebreo.
“El alto comisionado condena el ataque armado en Tel Aviv y recuerda que es la mayor pérdida de vidas israelíes en un solo ataque desde que comenzó el actual brote de violencia”, afirmó en una rueda de prensa la portavoz de la oficina del alto comisionado, sostuvo Ravina Shamdasani, portavoz de ONU en rueda de prensa.
Shamdasani señaló que la prohibición al paso en Israel puede equivaler a un castigo colectivo, lo cual está prohibido por el derecho internacional, y abonará “sólo para aumentar la sensación de injusticia y frustración que sienten los palestinos”, aseguró.
El castigo colectivo es un crimen incluido en la cuarta Convención de Ginebra.
Recordó que la respuesta de las autoridades israelíes incluye la cancelación de 83 mil permisos otorgados a residentes de Gaza y de Cisjordania para poder viajar durante el mes santo de Ramadán, la suspensión de 204 permisos de trabajo individuales a familiares de los supuestos atacantes, y el cerco de la localidad de donde provenían.
