«La promulgación del Sistema Nacional Anticorrupción es sin duda un paso adelante, pero ahora viene lo bueno: su aplicación en la realidad. De entrada el presidente EPN tiene un reto grande para escoger a un Secretario de la Función Pública con credibilidad. Luego que en la integración del Consejo Ciudadano no se vuelva a jugar a las cuotas partidistas, Y claro, ver los verdaderos alcance de la Ley 3de3. Pero lo que más trabajo costará, sin duda, será que haya la voluntad política de funcionarios, legisladores y auditores». Lo comentan en «Templo Mayor» de Reforma.