Ninguna persona está preparada para morir. Decir lo contrario es mentirnos.Amamos la vida, a quienes nos rodean, a nuestras hijas, nietos y amigas. Podemos hablar de cómo queremos morir pero no que nos guste. Teorizamos y razonamos. Entendemos que es un proceso biológico y, los creyentes, dejan todo en manos de Dios.

Pero a fin de cuentas, nos guste o no, es inevitable y siempre es en el momento menos oportuno (como si la muerte tuviera un momento adecuado). De ahí la importancia de tomar providencias y dejar lo poco o mucho que tenemos con seguridad jurídica. Vamos, hagamos el testamento y evitemos problemas a nuestros dolientes.

Septiembre es “el mes del Testamento”, que en términos simples es una campaña nacional que promueven la Secretaría de Gobernación, los gobiernos estatales y los notarios del país. Durante estos días, usted puede cumplir con este trámite de una forma ágil y económica, pues como cada año los notarios que participan en el programa reducen sus honorarios hasta 50 por ciento y amplían sus horarios de atención.

El diputado Francisco Garduza Mazariegos comentó sobre el tema: “Hay quienes piensan que no es importante tener un testamento, pero más vale tenerlo para no dejar problemas, dado que a través de él la familia tiene protección, además de que es un medio apropiado para que los padres que tienen la patria potestad de sus hijos  puedan designar un tutor y en caso de que ambos padres mueran, éste tenga la guarda y cuidado de los mismos y sus bienes”.

No olvidemos que el testamento brinda seguridad jurídica a la familia y evita posibles conflictos legales por la disputa de los bienes que deje una persona al morir. Casi todos hemos sabido de pleitos familiares por herencias no distribuidas en tiempo y forma. La ambición humana nos llega a todas y todos. Nuestros descendientes son buenas personas hasta que no demuestren lo contrario.

Dice Garduza Mazariegos: “El testamento da tranquilidad a la familia,  considero que es fundamental hacerlo y no significa que alguien vaya a morir, sino que es  una acción responsable que permite mantener la armonía, seguridad de la familia y evita posibles conflictos legales cuando alguien fallece y es testador”.

Y si queremos a nuestra familia no les dejemos problemas. Porque aún en armonía es complejo regularizar un inmueble intestado. Más cuando hay varios descendientes porque, no lo podemos negar, a veces las relaciones entre las familias no son las más cordiales y sensatas.

Si en septiembre tenemos la oportunidad de realizar este trámite y evitar problemas futuros hay que hacerlo. En verdad que evitaremos contratiempos a las hijas e hijos. Hagamos lo que queramos con lo que nos costó trabajo, ahorro y esfuerzo. Pero sobre todo, hagamos las cosas bien y en vida.

No dejemos pasar esta oportunidad, porque dentro de la campaña el  otorgar testamento no es costoso y solamente tiene que acudirse al notario de su elección para hacer los trámites, porque es la única forma legal, segura y eficaz para que una persona fallecida otorgue a otras sus bienes y propiedades, lo que les permitirá ser las legítimas herederas de su patrimonio.

Por hoy es todo, les deseo un excelente día y nos leemos en la próxima entrega.