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SinEmbargo/Infobae

Connie Inglis superó la anorexia y el miedo a exponerse. Es que esta joven británica utiliza la red social Instagram para mostrar su cruda realidad. En un año, pasó de estar al borde de la muerte a volver a sentir felicidad. “Se puede, se puede volver a ser feliz”, escribió en varias oportunidades en su cuenta para acompañar las impresionantes imágenes de su transformación.

“Primero quiero que sepan que este no es un post para mostrar lo flaca que estaba o lo bien que me sobrepuse. Es para mostrar, por suerte, que no importa cuán perdido estés en tu propia cabeza, es posible escaparse, ¡es posible volver a ser feliz!”, escribió para sus más de 20 mil seguidores.

Según contó la propia joven, ya pasó un año desde que fue “succionada por un acto mental”.

 

“Estaba tan enferma que hacía todo lo que podía para no comer NADA. Mi desorden alimenticio me controlaba”, reveló. Así, en ese estado, la entubaron. “Y me vi forzada a ver cómo aumentaba de peso cada semana sin que pudiera deternerlo (y sí que lo intenté). Odié a todos los que me forzaron a eso. Me sedaban para que no me hiciera daño ni hiriera a nadie. En esta época, hace un año, estaba hecha un desastre”, continuó explicando.

La joven explicó que gran parte de su recuperación se debió a que tiene gente alrededor que la quiere. “Mis amigos, mi novio, todos venían a verme todo el tiempo. Y mis padres estaban allí todos los días”.

Inglis reconoce que todos sus problemas no desaparecieron, pero se siente “lo suficientemente fuerte” como para enfrentarlos. Foto: Instagram/my_life_without_ana.

“Estaban allí para recordarme que debía intentarlo. Y eso hice. Con el tiempo, empecé a preguntarle a mi novio si estaba bien que comenzara a comer. Me di cuenta de cuánto me querían y cuánto quería yo a toda esa gente. Así que comencé a luchar, con toda mi alma”.

Inglis reconoce que todos sus problemas no desaparecieron, pero se siente “lo suficientemente fuerte” como para enfrentarlos.

De hecho, lo increíble de sus publicaciones es que no busca la pose más halagadora, sino que se mofa de sus imperfecciones. Su mensaje es inspirador: “Amo mi cuerpo al natural. Porque la búsqueda de un cuerpo perfecto nunca me hizo feliz. Aceptarme me hizo feliz… así que feliz día para todos y recuerden que son hermosos sin importar nada más”.