«En la madrugada de este 5 de junio reinaba la algarabía entre los más cercanos al presidente Peña Nieto. De pronto una corriente eléctrica cruzó el salón porque el Presidente miró a su Secretario de Salud, y como si el resto de los invitados no existiera, pronunció 5 palabras que por poco infartan a más de 3 que creen saber interpretar palabras y gestos de Peña Nieto; también tuvieron la virtud de limpiar de colesterol malo las arteras del doctor Narro Robles: «Pepe, te veo muy bien». Con seguridad muchos no encontraron un mensaje oculto en esas palabras y quizás creyeron que sólo era un rasgo de amabilidad mexiquense. Mejor para el doctor Narro». Lo comenta Juan Bustillos en «Impacto.mx».