«Fue una muerte anunciada, mi papá ya estaba muy cansado, tenia demencia senil, ya no hablaba, ni caminaba, él ya quería irse», declaró Erick Lechuga, hijo del comediante. Informó que no habrá misa y que su funeral ha sido muy tranquilo y privado al que sólo familiares y algunos artistas amigos como Héctor Suárez y Rafael Inclán han acudido. La nota es de Abantka Castillo en «Milenio».