Normal…absolutamente normal: los ciclos concluyen, lo que empieza termina…No hay objeción o discusión alguna…Como dice la canción: “Así es la vida…” y así hay que asumirla.
De acuerdo a esta sentencia, la administración municipal que encabeza Américo Zúñiga Martínez, inició un día 1 de enero de 2014 y deberá concluir el próximo 31 de diciembre de este agónico 2017.
Como todo gobierno, inició gestión con una enorme expectativa sobre su actuar… quizás los primeros 8 o 10 meses fueron de aprendizaje, acomodamiento, ajustes y planeación, tiempo en que se empezó a especular sobre la obra que habría de dejar como constancia por su paso en la historia.
Hoy, cuando faltan escasos 33 días, de lo que más se habla es de la gran obra que se ha entregado a los xalapeños de todos los niveles sociales.
No ha habido exclusión alguna, por igual se han pavimentado calles en las colonias más populares que en el fraccionamiento de mayor plusvalía… así ha sido el actuar de la presente comuna bajo la dirección del joven alcalde Américo Zúñiga.
Hay mucho que reseñar, pero para quien esto escribe, la obra más importante es la que NO se ve, la del drenaje que ha crecido por el subsuelo de manera exponencial y que a futuro será de gran beneficio para las familias al evitar inundaciones en sus calles y colonias y, teniendo la certeza de que los deshechos hogareños van directos a una red de drenaje que garantiza salubridad colectiva.
Por otra parte, en las escuelas del nivel básico, se va a extrañar la presencia del alcalde entregando apoyos como nunca antes se había hecho… aulas, domos, canchas, bardas perimetrales, equipos de cómputo y material didáctico de apoyo.
El centro histórico merece una mención especial, porque a lo largo de los años y en el paso de las distintas administraciones municipales, NO se habían atrevido a “meterle mano” por temor a las críticas…Hoy, se ha realizado una muy importante obra que comprende desde los drenajes, pavimentación con cemento hidráulico y, quizás lo más visto y por ello lo más cuestionado es la liberación de espacios públicos en favor del peatón… esta circunstancia NO se la perdonan a Américo algunos capitalinos que prefieren más amplitud en calles para hacer más ágil la circulación de carros y camiones que deben transitar por el centro de la ciudad, con los argumentos de que somos, efectivamente, la ciudad con mayor índice per cápita del parque vehicular en todo México y al parecer continental.
Sin embargo, a ello, hay que anteponer la urgente necesidad de librar más espacios para las personas, especialmente, para quienes tienen necesidad de caminar para atender sus necesidades ocupacionales, ya sean laborales o de gestión y, por otra parte, hacer más disfrutable el centro de Xalapa en favor de quienes gustan de andar sus calles, su parque Juárez, sus cafés, restaurantes y teatros ubicados en el primer cuadro de la ciudad.
Sin duda, con la obra realizada, se sientan las bases para generar atractivo para la actividad turística como fuente de movilidad económica.
Hay que decirlo, se podrán escribir cuartillas y más cuartillas sobre el legado que dejará la actual comuna, pero basta con decir que NO tuvieron miedo a cambiar la imagen del centro de la ciudad y, eso, ya dice bastante.
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