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SINEMBARGO.MX

Lorena vio a su perrita “Tita” triste y adolorida, entonces, decidió automedicarla con Naproxeno de 250 mg; una tableta diaria durante cuatro días seguidos sin ver ninguna mejoría.

Resultado de la automedicación: “TITA” murió. La dosis que suministró Lorena a su mascota fue 31 veces superior a la indicada. El primer día de auto medicación tuvo para una gastritis, que posteriormente se convirtió en una úlcera, luego pasó a una úlcera perforante y su desenlace fue fatal: una peritonitis que “Tita” no resistió.

Casos como el de Lorena llegan a diario a todas las veterinarias de México. Una imprudencia de los dueños de las mascotas puede terminar mal.

ERROR

Cuando tu mascota padece un malestar, es frecuente que pienses en la posibilidad de recurrir a tus propias medicinas para aliviar su dolor, y de paso ahorrarte la visita al veterinario. Pero el “remedio” puede salirte más caro que la enfermedad.

La falta de conocimiento de muchos dueños de mascotas cuando piensan que: “Si yo, tengo fiebre, me tomo esta medicina, cuando mi perro tenga fiebre, le ofreceré la misma” ERROR.

Ante todo el perro no es una persona, por lo que su cuerpo no acepta ciertas sustancias que, sin embargo, sí toleramos los humanos.

SOLO INDICACIÓN MÉDICA

Por ejemplo, antiinflamatorios, como el ibuprofeno, y los analgésicos, como el paracetamol, se encuentran entre los fármacos que en más ocasiones los propietarios dan a sus mascotas, sin consultar antes con su veterinario.

“Sin embargo, el uso del ibuprofeno en perros no está autorizado por la Agencia de Medicamentos. Este organismo sí permite, sin embargo, algunos tipos de compuestos con paracetamol en las mascotas.

Claro, siempre y cuando sea indicado por el veterinario, no necesariamente ir hasta la veterinaria, con una simple llamada telefónica puede ser suficiente y, en algunos casos, salvar incluso la vida del perro”, asegura la médica veterinaria Lucero Sandoval de Esterilizados.com.

RECUERDA QUÉ:

Los medicamentos humanos pueden ser peligrosos, e incluso mortales, cuando los ingiere un perro. Nunca des a tu mascota fármacos para personas sin la prescripción de su veterinario. No trates de calcular la dosis que debe ingerir el perro infiriendo la información que contienen los prospectos para los niños o para el adulto.Ten en cuenta que el mercado veterinario ha avanzado de forma notable: existen productos específicos para el perro que velan por su salud y seguridad.