La casa-biblioteca de José López Portillo, último vestigio de la «Colina del Perro», ya fue demolida. El emblema de la corrupción de aquel sexenio era la única construcción que se mantenía de pie en el predio de 12 hectáreas que el ex-Presidente adquirió en 1982 para construir su vivienda y tres más para sus hijos mayores. En 2017 fue demolida y ahora mediante la figura de un polígono de actuación, buscan construir una torre de departamento de 34 pisos, aunque existe oposición de los habitantes de la Toscana. La nota es de Samuel Adam en «Reforma».