La opción de Texcoco para la construcción del NAIM no es un proyecto, es una realidad, ahí está, tiene avance físico- unos dicen del 20%, otros del 30%-, requieren 88 mil millones de pesos que si no los da el gobierno ya dijeron que lo pueden conseguir en los mercados internacionales; MITRE y el Colegio de Ingenieros Civiles de México ya dictaminaron que es la opción menos mala para resolver el problema de saturación a LARGO PLAZO, Santa Lucía es base estratégica militar del país, no cuenta con proyecto ejecutivo y no resolvería el problema a LARGO PLAZO; no procede la consulta, según el art. 35 constitucional y menos puede ser vinculante si no participa el 40% de la lista nominal de electores; economistas serios dicen que si se cancela Texcoco responderán negativamente los mercados internacionales y será un mal mensaje de inicio de gobierno. Estos son algunos de los argumentos manejados. Ojalá sea cierto lo de Leo Zuckerman: «Lo de la consulta es una faramalla. Con ella AMLO justificará ante su gente que cambió de opínión- de lo que prometió en campaña por que asi lo decidieron ellos». Ojalá así sea, porque las señales dicen lo contrario.