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EFE/AP/Milenio

Canadá es el principal proveedor de acero de Estados Unidos, seguido por Brasil y México.
México exporta 80 por ciento de este sector a los Estados Unidos. (Foto: Archivo).

La subida arancelaria global del 25 al 50 por ciento a las importaciones de acero y aluminio, aplicada por el presidente Donald Trump, entró en vigor después de la medianoche de este miércoles (hora local), una medida que afecta a dos sectores que el mandatario considera estratégicos.

México pedirá a EU ser excluido de arancel del 50% al acero y al aluminio, adelanta Ebrard

Medida exime al Reino Unido
El anuncio estadunidense realizado este martes, que exime al acero y al aluminio del Reino Unido de una duplicación de los aranceles hasta el 50 por ciento, se produjo en una proclama firmada el martes por Trump que elevará los aranceles a los metales para otros países a partir del 4 de junio.

La orden ejecutiva, que ajusta los gravámenes sobre ambos metales, estimó que es necesario permitir la implementación del acuerdo bilateral firmado con Londres el 8 de mayo y otorgarle en consecuencia un tratamiento diferente.

Para el 9 de julio, no obstante, se evaluará si el Reino Unido ha cumplido dicho pacto y se considerará si el aumento también pasará a afectar a ese país.

En el acuerdo de mayo, Estados Unidos decía reconocer las medidas de seguridad económica adoptadas por el Reino Unido para combatir el exceso de capacidad siderúrgica mundial y sin entrar en detalles avanzaba que se iba a negociar un acuerdo alternativo al respecto.

La versión británica aseguraba que se había cerrado el compromiso de que el entonces arancel del 25 por ciento sobre el acero se redujera a cero, pero según precisó la cadena británica BBC el martes ese pacto todavía no había entrado en vigor.

El resto de socios comerciales de Estados Unidos sí se ven afectados por la subida arancelaria.

¿A que países afectará?
Los principales perjudicados son Canadá, el gran suministrador de ambos metales a Estados Unidos, así como México, Brasil, Corea del Sur o Vietnam en lo relativo al acero, y también China, el segundo país que más aluminio vende a la primera economía mundial.

Su orden ejecutiva precisó que la medida es necesaria para que dichas importaciones «no amenacen con perjudicar la seguridad nacional».

El aumento «contrarrestará con mayor eficacia a los países extranjeros que continúan descargando excedentes de acero y aluminio a bajo precio en el mercado estadunidense, socavando así la competitividad de las industrias estadunidenses» del sector, señaló el mandatario en la misma.
Trump consideró que aunque los gravámenes del 25 por ciento han facilitado «un sostenimiento crítico de los precios» en el mercado nacional, todavía no han permitido que estas industrias desarrollen y mantengan las tasas de utilización de la capacidad de producción que son necesarias para su fortaleza y las necesidades de defensa nacional.

México pedirá ser excluido de aumento de aranceles: Ebrard
El secretario de Economía, Marcelo Ebrard, consideró este martes que el aumento de aranceles es una medida «injusta», y adelantó que este viernes presentará en Washington los argumentos de México para solicitar ser excluido de la medida, como ocurrió con el Reino Unido.

«No creo yo, en primer lugar, que se puedan sostener en el tiempo (…) Se va a tener que ajustar porque el impacto económico es muy grande», dijo Ebrard en declaraciones a los medios a la llegada de un evento de la Guía Michelin en Ciudad de México.
En segundo lugar, añadió, «lo veo injusto para México porque con México tiene superávit, Estados Unidos».
«No tiene sentido poner un arancel a un producto en el que tú tienes superávit. Normalmente se pone cuando tú tienes déficit, no superávit», explicó.
El funcionario detalló que la medida impactará negativamente tanto a la economía mexicana como a la estadunidense, especialmente en sectores como el automotriz, la construcción, la metalmecánica y la electrónica.

Recordó que Estados Unidos ya había impuesto anteriormente un arancel del 25 por ciento al acero mexicano, pero ahora, con el nuevo anuncio, la carga arancelaria aumentará de forma significativa.

«Yo creo que esto va a tener una afectación a la economía de los Estados Unidos», advirtió.
En su visita de este viernes a Washington, el secretario insistirá en que México debe ser tratado como el Reino Unido, país que fue excluido de la medida.

«Es lo que vamos a plantear (..) Y espero el viernes poder convencerlos (a las autoridades estadunidenses)», dijo.

¿Por qué Trump aumentó estos aranceles?
Trump dice que se trata de proteger la industria estadunidense. Reiteró ese argumento el viernes, cuando anunció por primera vez el arancel del 50 por ciento durante una visita a trabajadores del acero en Pensilvania, donde también discutió una «asociación planificada» entre U.S. Steel, de Estados Unidos, y Nippon Steel, de Japón.

En su discurso en la planta Mon Valley Works–Irvin de U.S. Steel, en los suburbios de Pittsburgh, Trump dijo que el aumento de aranceles «protegería aún más la industria del acero en Estados Unidos». Poco después, adoptó el mismo tono al compartir planes para también aumentar los aranceles sobre el aluminio importado.

En la proclama del martes, Trump afirmó que los aranceles más altos asegurarían que el acero y el aluminio importados «no amenacen con perjudicar la seguridad nacional».

«A mi juicio, los mayores aranceles contrarrestarán de manera más efectiva a los países extranjeros que continúan enviando acero y aluminio de bajo precio y en exceso a Estados Unidos», dijo en la proclama.
¿Qué productos podrían verse afectados por aranceles más altos sobre el acero y el aluminio?
Varias empresas que dependen del acero y el aluminio fabricados en el extranjero ya han comenzado a sentir los impactos de los aranceles impuestos previamente por Trump. Pero los nuevos incrementos podrían elevar aún más los costos.

El acero y el aluminio se utilizan en productos como lavadoras, aparatos electrónicos y automóviles. Gran parte de la industria automotriz depende de una cadena de suministro global. E incluso si no vas a comprar un vehículo nuevo, las reparaciones podrían involucrar piezas que utilizan importaciones de cualquiera de los metales, lo que aumentará los costos generales de mantenimiento.

En los supermercados, el acero y el aluminio son omnipresentes en el empaque de muchos alimentos, como latas de atún, sopa y nueces. Los expertos advierten que aumentar los impuestos de importación sobre estos materiales podría llevar a precios más altos en los comestibles en general, lo que tensará aún más los bolsillos de los consumidores.

Los aranceles sobre el aluminio y el acero también tienen implicaciones más amplias para la construcción y el transporte en su conjunto, ya que muchas partes y materiales están hechos con estos metales. Los economistas advierten además sobre impactos colaterales.

Incluso si un producto no está directamente empaquetado en acero o aluminio, podría haber costos más altos para fabricar el estante en el que se vende, por ejemplo, o el camión utilizado para transportarlo a la tienda. Y todo eso podría repercutir en el consumidor en el futuro.

Si la competencia extranjera es eliminada debido a estos nuevos aranceles, los productores de acero y aluminio de Estados Unidos también podrían encontrar espacio para aumentar sus propios precios. Como resultado, incluso las empresas que no compran estos metales extranjeros podrían terminar pagando más.

Los precios del acero ya han subido 16 por ciento desde que Trump asumió la presidencia a mediados de enero, según el Índice de Precios al Productor elaborado por el gobierno.

En marzo de 2025, el acero costaba 984 dólares por tonelada métrica en Estados Unidos, significativamente más que en Europa (690 dólares) o en China (392 dólares), según el Departamento de Comercio de Estados Unidos.

ksh