Aunque no se han determinado por completo las causas del accidente del Airbus A 320 de la compañía Germanwings, ya recuperaron las dos «cajas negras» que seguramente van a revelar o a develar algunos de los misterios del por qué esta nave con 150 personas a bordo se estrelló de lleno contra un macizo montañoso y rocoso de la cordillera francesa de los Alpes, lo único que se sabe es que el impacto fue brutal, sin ninguna posibilidad de que hubiera habido sobrevivientes, también se sabe que el aparato perdió altura, descendió a más o menos la tercera parte de la altura de vuelo crucero que llevaba, el descenso fue abrupto, por lo que se ha adelantado la hipótesis de que la nave pudo haber sufrido una despresurización lo que hizo que los pasajeros así como los tripulantes perdieran el conocimiento y, por lo tanto, el avión volara sin ningún tipo de «gobierno» por parte de los pilotos hasta que se encontró en su vuelo con la referida montaña, el aparato simplemente se deshizo, se despedazó, quedando sus restos esparcidos en un radio de aproximadamente 2 kilómetros cuadrados, en una ladera de difícil acceso, en donde las condiciones del clima están dificultando la recuperación de los cuerpos de los pasajeros y de los restos del avión. Esta tragedia tiene consternada a toda Europa, en donde estos vuelos de bajo costo son muy socorridos por los europeos porque son vuelos verdaderamente baratos, no más de 100 euros y líneas aéreas como Germanwings existen en casi todos los países europeos. Lamentable y muy doloroso.
