Salvo su mejor opinión, pero en los mensajes, los ciudadanos, lo que «queremos ver es sangre», y no, no se espante usted, no lo lo tome literalmente, a lo que nos referimos es que en esta millonada de mensajes políticos que los partidos políticos están transmitiendo a través de los medios masivos de comunicación, lo que queremos ver los ciudadanos, al menos nosotros, son las verdades incómodas del adversario, lo que queremos es que los partidos se «saquen los trapitos al sol», es decir, si es necesario que sepamos que un ex gobernador del estado de México que ahorita funge como presidente nacional del PRI usa relojes ostentosísimos con un costo de 2 millones de pesos, pues sí, sí queremos saber ese tipo de cosas. A los ciudadanos nos interesa saber cómo viven los políticos, en qué invierten el dinero bien o mal habido, nos interesa saber si tienen casas grandotas o chiquitas o, si ya de plano tienen casas de los dos tipos, pero también nos interesa saber cosas como si un gobernador se apropia del cauce de un río y construye para asegurar el riego de su rancho una mega presa, pasando por alto todo tipo de disposición medioambiental, o si un partido como el PRD ha postulado para puestos de elección popular a tipos de dudosísimo prestigio y bajo sospecha de estar coludidos con la delincuenccia organizada. Eso es lo que nos interesa saber para modular nuestro voto, por el contrario, a los ciudadanos no nos interesa saber de buenas maneras en los spots que pasan por los medios.