¿Cómo conciliar eso? porque el Gobernador está ejerciendo sus facultades, pero también es una realidad que no existen en el estado políticos en actividades de proselitismo como los dos senadores, ni con su trayectoria, ni con algún priista que siquiera se les acerque tantito en las encuestas. Creemos que ninguna de las dos partes le debe dar la espalda a la realidad. Creemos que ambas partes deben poner su «granito de arena» para una solución. ¿Tendrá que venir Francisco?