Comparecer: acción de comparecer ante un juez o un superior personalmente o por representante. Esta es una de las varias acepciones que tiene la palabra en cuestión, según el Diccionario del Español Moderno, de Martín Alonso, sexta edición, 1982.

Como se explica, algo tiene que ver con las llamadas comparecencias que se llevan a cabo en los congresos locales después de que el Ejecutivo del Estado correspondiente, haya presentado ante éste, lo que se llama Informe de Gobierno. La que consisten en la presencia de los encargados de despacho del gobierno en turno, ante integrantes de las comisiones correspondientes de legisladores que integran el citado Congreso. Con el objetivo de analizar y revisar la forma en que se llevaron a cabo los trabajos que corresponden a cada Secretaria de Estado, para conocer si realmente lo informado por el gobernador en turno se llevó a cabo y la forma en que se efectuó.

Ejercicio eminentemente político-administrativo de gran importancia, pues de éste se debe desprender y dar a conocer a la población como se está llevando a cabo la administración de recursos económicos y humanos de cada entidad federativa, supuestamente.

Pero lamentablemente, desde hace bastante tiempo, independientemente del formato que se sigue en estos interesantes ejercicios, el objetivo principal de éstos se ha venido desvirtuando y de ser un interesante análisis del trabajo realizado por el titular del Poder Ejecutivo en turno, de parte de los diputados que integran la correspondiente Legislatura, ha pasado a ser una especie de show, en el cual lo único que importa es hacerse notar ante los asistentes por haber efectuado la pregunta más importante desde el punto de vista político, más no la más comprometedora al Servidor Público en turno. Pues se trata de lucirse ante sus pares, el poco público que asiste (generalmente empleados acarreados de la institución del Secretario compareciente) y los representantes de los medios de comunicación. En otras palabras se han convertido en lo que se llama “el club de los elogios mutuos”. Pues tanto quienes preguntan, los representantes populares, como quiénes responden, los titulares de las diferentes dependencias del Ejecutivo del Estado, en su mayor parte lo hacen, salvo contadas excepciones -en algunas ocasiones representantes de partidos de oposición- en un tono o sentido que solamente busca el lucimiento personal de las partes. Más no conocer a fondo la verdad sobre el trabajo que supuestamente llevó a cabo el gobernador en turno.

Es por lo citado que el cambio en el formato de las comparecencias debe de darse. Para que el objetivo de éstas se cumpla. Pues como lo manifestó el presidente de la Junta de Coordinación Política de la LXIII Legislatura, el experimentado político Juan Nicolás Callejas, hay inequidad entre los representantes de los partidos para participar. Además de que el lucimiento personal es lo que menos importa, pues lo que se tiene que conocer a fondo es como está operando el Estado y la problemática que tiene cada Secretaría.

Hasta el momento todo parece indicar que sí podrán hacerse algunas modificaciones al formato actual de las comparecencias, antes de que sea entregado a la LXIII Legislatura del Estado el IV Informe de Gobierno del Gobernador de Veracruz. Hasta el viernes. noti-sigloxxi@nullhotmail.com