Entre las quejas más recurrentes que los ciudadanos expresan en relación con sus gobernantes está la cerrazón o ignorancia de la que a veces hacen gala. De lo mucho que se quejan los estudiantes de sus mentores es que hay “mucho rollo” y poca práctica. Cierto. A veces abusamos de un pragmatismo feroz que impide hacer pausas y reflexionar sobre lo que puede ser mejor o peor, y a veces nos metemos tanto en los textos, que olvidamos el mundo que pisamos.

Por eso celebro que la Diputación veracruzana, los gobiernos del Estado y municipales y la Universidad Veracruzana acordaron formar un equipo de trabajo permanente, cuya agenda de actividades prioriza un proyecto “madre” que logre Planes Municipales de Desarrollo más profesionales y útiles para los ediles y población.

Este esfuerzo debe valorarse, porque se retoma una alianza que, si bien nunca ha sido completamente fracturada, digamos que en los últimos lustros estuvo bastante fría.

Y es que para el presidente de la Comisión Permanente de Desarrollo y Fortalecimiento Municipal, Alejandro Zairick Morante: “No están claros los lineamientos, las bases y la manera de elaborar dichos documentos, ya que muchas veces los propios alcaldes ignoran para qué sirve el Plan Municipal de Desarrollo”.

Hay que recordar que estos trabajos iniciaron hace unos meses, con el compromiso de revisar y analizar los 212 Planes Municipales de Desarrollo y que en realidad sean un instrumento para las comunas; no sólo –como se acostumbraba– un “requisito qué cumplir”.

Será interesante conocer las conclusiones y recomendaciones que el equipo de trabajo interinstitucional realice. Porque nos permitirá aproximarnos al conocimiento de cómo están nuestras autoridades municipales y su conocimiento sobre la realidad de los territorios que gobiernan.

Nuestro estado es un auténtico rompecabezas y no se puede hacer tabla rasa. Es decir, lo que para uno sirve, para otros no. Además, están las zonas metropolitanas que se han formado durante los últimos años, y que concentran y generan la mayor aportación económica a las arcas estatales.

Nuestras realidades cambian en cuestión de minutos. Por ejemplo, lo que ocurre en Xalapa no lo viven algunos municipios circunvecinos. Vamos, Banderilla es diferente a San Andrés Tlalnelhuayocan, aunque pobladores de esos municipios vengan y realicen sus actividades en la capital. Somos diametralmente opuestos, pero compartimos momentos y a veces, espacio.

Para darnos una idea de la seriedad con la que se toma este trabajo, cito la información de quienes estuvieron presentes en la reunión: “El legislador Alejandro Zairick Morante; el secretario de Fiscalización del Congreso, Tomás Antonio Bustos Mendoza; el subsecretario de Planeación de Gobierno del Estado, Arturo Jaramillo Díaz de León, y las directoras del Instituto Veracruzano de Desarrollo Municipal (Invedem), Marilda Rodríguez Aguirre, y de Vinculación de la UV, Rebeca Hernández Arámbulo”.

Este equipo volverá a reunirse el próximo 8 de enero, para continuar con las revisiones, adecuaciones y observaciones a los Planes de Desarrollo. No hay que olvidar que ahora toda planeación debe basarse en el presupuesto, y por ello no se vale comprometer lo que no se tiene, cuando se trata del futuro de nuestras familias.

Por hoy es todo. Nos leemos en la próxima.