La situación política y económica por la que atraviesa Veracruz es ampliamente compleja, convulsa y necesitada de un cambio profundo. Con un distanciamiento practicante total entre los políticos y los ciudadanos, el ciudadano se siente incomprendido, ajeno a la vida política, como si fuera un instrumento usable en momentos puntuales como lo son las elecciones.
El error, la situación devenida, no es sólo culpa de una de las partes, si no de las dos. Una por acomodarse en su espacio de confort, no responsabilizándose de la vida pública y dejando a los otros dicha función. Por otro lado, los líderes políticos también se acomodaron en la falta de control del ciudadano, actuando y acostumbrándose a ejercer tan necesarias y difíciles tareas sin el control de la sociedad.
Lee Hamilton, miembro de la Casa de Representantes de los Estados Unidos por 34 años, menciona que: “la prensa y el público prestan mucha atención a lo que dicen los políticos, pero menos a lo bien que hacen lo que deben hacer”. Considerando esta cita, viene a mi mente un político veracruzano que desde muy joven y desde la trinchera que su partido le designe su actuar siempre se ha vislumbrado como un hombre íntegro, pulcro, corresponsable de sus actos y con miras de un beneficio hacia su entorno inmediato.
En efecto, en dicha descripción me refiero a José Francisco Yunes Zorrilla –Pepe Yunes- cuando inicia su trayectoria política como Presidente fundador de la fundación Colosio filial Distrital de Perote, Coordinador Estatal de fotocredencialización en Veracruz, Presidente Municipal de Perote, Diputado Federal en la LVIII Legislatura, Diputado Local en la LX Legislatura, Diputado Federal en la LXI Legislatura y hoy día, Senador por el Estado de Veracruz.
Pepe Yunes se ha distinguido como un político joven, fresco y con cualidades que “muy pocos pero, muy pocos” se pueden jactar: la cualidad principal entre ellas es la sinceridad. Es un servidor público que no busca hipérboles y declaraciones engañosas. ¡Comprobado en cada uno de sus recorridos y discursos emitidos por la entidad veracruzana!
Otra de las cualidades a destacar en Yunes Zorrilla es el nivel excepcionalmente alto de energía y una habilidad de enfocarse en las tareas inmediatas. Tienden a tener pocos pasatiempos, por la simple razón de que el puesto público absorbe todo el tiempo; siempre hay otra cosa que hacer. Esto se demuestra en cada de uno de sus cargos públicos y actividades encomendadas, puesto que, siempre tiende la mano para contribuir al éxito de la Nación y en encontrar maneras de mejorar la vida a los que representa.
Mientras que la mayoría de los políticos – buenos e indiferentes – son expertos en identificar y aprovechar temas que beneficiarán al partido. Pepe Yunes tiene una habilidad extra: sabe cómo usar el sistema político para conseguir resultados. Entiende dónde ir en la burocracia federal para conseguir ayuda en beneficio del ciudadano, y piensa creativamente sobre cómo usar el proceso legislativo.
El aspirante a la gubernatura de Veracruz en 2016 ha demostrado su capacidad para demostrar que al ocupar una curul como diputado o senador es por derecho ciudadano. Donde abraza los retos y las oportunidades que le ofrece esta encomienda representativa.
Yunes Zorrilla es un excelente comunicador, simplemente, le agrada a todo tipo de persona, aunado a su accesibilidad. Es sensible al humor del ambiente, sabe cómo leer un público, y es rápido a responder. Generalmente, abierto a otros puntos de vista. Y quizás lo más importante, que entiende que la política es un dado y toma, y la habilidad de encontrar un bien común. Su imagen lo ha distinguido como un buen político que escucha muy atentamente a los del otro lado, no sólo para aprender sus razones, pero especialmente para aprender cuánto los puede empujar y cuánto hay que empujarlos para llegar a un consenso.
Finalmente, nunca olvida de dónde es y lucha por no sucumbir a sus ideales. Pepe Yunes sigue fiel a sus conciudadanos, y tiene una fe perdurable en la consideración, la inteligencia, y el patriotismo de los votantes. Considera que sin ellos, es casi imposible ser un representante verdadero, puesto que se reconoce como el portador de las esperanzas, los sueños, y los intereses de los veracruzanos.
En pleno 2015, estamos empezando a caminar como un pueblo que exige no repetir los errores de siempre. Nuestro Veracruz confía plenamente en nosotros como herramienta de cambio. Por eso, porque vuelve a haber esperanza, está recuperándose el coraje, la fuerza y la sonrisa. Sigamos haciendo política de manera diferente.