¿Cómo se hace la rica la gente rica? Salvo contadas excepciones, la gente se hace rica gracias a su trabajo y al éxito en sus inversiones.
El coaching financiero es una herramienta que te ayuda a obtener una nueva perspectiva sobre tu situación financiera. Es, además, un trampolín que te impulsa a elegir correctamente el abanico de oportunidades al que puedes acceder, dejando atrás cargas y creencias que a menudo te limitan.
Por lo tanto, implica una relación profesional personalizada de observación, indagación y descubrimiento, ya que al recolectar información permite establecer objetivos financieros ambiciosos pero alcanzables, disminuyendo las probabilidades de fracaso financiero.
Entonces, ¿En qué te puede ayudar un coach financiero?
De entrada, te ayuda a reconocer qué tipo de inversionista eres y quieres ser, ya que más allá de la meta y el plazo, necesitas identificar tu nivel de tolerancia al riesgo y tu situación patrimonial.
Descubrirás si te gusta o no la volatilidad en las ganancias/pérdidas de tus inversiones.
Determinarás la clase de utilidades que estás buscando, es decir, el nivel adecuado entre la ganancia y el riesgo.
Aprenderás a controlar tu estado mental si obtienes una ganancia o pérdida extraordinaria.
Sabrás cuanto capital estarías dispuesto a arriesgar en una transacción determinada.
Evitarás que la muchedumbre (o incluso tus amigos) influya en tus sentimientos, pensamientos y acciones financieras.
Descubrirás lo limitado de tu actuar, es decir, saber aceptar el hecho de que no se puede tener control sobre los mercados, únicamente puedes controlar las decisiones de apertura y cierre de tus transacciones.
Usarás el intelecto para decidir cuándo invertir y cuando es mejor retirarse.
El coaching cierra la brecha entre saber qué hacer y conseguir que se haga realidad. La función de mentor no es decirte qué debes hacer, sino situar causas y efectos en la toma de decisiones financieras, haciéndote responsable de tus acciones.
¿En qué más ayuda un entrenador financiero?
En temas como la elaboración de presupuestos, análisis, flujos y evaluaciones de inversiones, en diseño de un plan de riquezas, en la gestión de riesgos, a fin de superar los cinco obstáculos que impiden que la mayoría de la gente consiga sus metas financieras:
La falta de establecimiento efectivo de un plan estratégico.
Conocimiento insuficiente de los instrumentos de inversión que se manejan.
Falta de continuidad y seguimiento en las estrategias y desarrollo de portafolio.
Límites autoimpuestos.
Confusión entre posibilidad y oportunidad.
El coach financiero, en suma, trabaja como un entrenador de dinero que te dará un claro enfoque sobre la forma en que administras tus finanzas, gracias a él, te sentirás mejor equipado para hacer frente a tus desafíos financieros.
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