Cuenta la historia que: “El afamado compositor Richard Wagner nació en 1813. Su nombre tiene 13 letras. Escribió 13 óperas. Los números de su año de nacimiento suman 13. Encontró su vocación musical un 13 de octubre. Sufrió 13 años de destierro. Terminó Tannhauser […ópera en tres actos basada en dos leyendas alemanas] un 13 de abril y dejó de ser tocada el 13 de marzo de 1845; tras su fracaso en París, fue repuesta el 13 de mayo de 1895.
El teatro de Riga (allí se presentó como director de orquesta) se inauguró un 13 de septiembre. La casa donde se llevaban a cabo sus festivales en Bayreuth, fue abierta un 13 de agosto y el último día que pasó en ella fue un 13 de septiembre. Wagner murió el 13 de febrero de 1883, decimotercer año de la unificación de Alemania.”
El Filósofo hace suya la frase de que en la vida: “No existe la casualidad, lo que se nos presenta como azar, surge de las fuentes más profundas […del destino]”
Comento lo anterior debido al anuncio hecho por Grupo Imagen Multimedia, en el sentido que la prestigiada periodista Adela Micha Zaga, estará al frente del noticiero Primera Emisión de Imagen Informativa, que se transmite por el 90.5 de FM.
No es casualidad que a partir del próximo 22 de septiembre, en un súper horario de 6:45:00 a 11:00 horas, de lunes a viernes, a Adela Micha le den un espacio informativo para iniciar con renovados bríos un nuevo esfuerzo en la radio.
No, ¡No es casualidad…! es simplemente una sincronía con el destino-universo, que tiene para Adela tareas mayúsculas, ella es una mujer tocada por los Ángeles de Dios, que viaja disfrutando la vida, tanto como el paisaje. Adela, distingue el espacio noticioso, con su veracidad, genio, carisma y talento, tiene la virtud de asociar felicidad, con trabajo, amor y familia y tomarse el tiempo para ser feliz.
Claro que no es casualidad –es causalidad– que a Adela Micha se le asigne un nuevo espacio, ganado a pulso; tras este digno reconocimiento hay una vida de esfuerzo, lucha, sacrificio y entrega total a la comunicación social.
Adela, honrando con su eficiencia a la mujer mexicana, ha aprovechado el tiempo para construir un envidiable liderazgo; mientras otros dudan en arriesgarse, ella se aventura en el río de la vida; por eso ha crecido exponencialmente, demostrando que en este país machista… ¡las mujeres tienen mucho que aportarnos!
Adela Micha, es una mujer talentosa, sensible al momento histórico, brilla con luz propia en el horizonte de la comunicación social, su vida profesional inició desde abajo como reportera. Y si en 20 años de ejercicio profesional ha sabido ascender, es porque está plena de valores, pondera más el “ser” que el “tener”; valores que afianzan sólidamente la eficiencia y eficacia en su trabajo, que la han llevado a crecer como un excepcional ser humano y una ejemplar comunicadora social.
Adela, es una mujer que nació pa’ triunfar y trascender, tiene un rating excepcional en su programa de la radio, en las noticias por Adela y en las muy gustadas entrevistas semanales, en la que ha invitado a líderes, de quienes queríamos llegar hasta sus entresijos emocionales. Cuando una vida esta plena de valores, por añadidura llega la abundancia, la armonía, el equilibrio, el reconocimiento… ¡y el éxito!
Es una mujer que honra su trabajo, su secreto: una entrega total, pasión sin límites en su tarea –sin medias tintas– en vez de competir… ¡comparte su sabiduría!; siempre dispuesta a dar incondicionalmente, con grandes sueños y mejores proyectos, comprometida con un público que la adora, el resultado es predecible: un liderazgo impresionante, es por ello que se le reconoce con un nuevo espacio informativo. Le deseo y auguro muchos éxitos más a mi admirada Adela.
Resulta que el viejo Filósofo, acompañado del Simpliano, llega a la cantina en Güémez “Los tres Huastecos” de su querido amigo Antolín Marroquín, a tomar unas cervezas; en el lado opuesto de la barra, Simpliano mira a dos tipos muy fregados, discretamente le dice al viejo campesino:
–– Mira qué casualidad a esos dos ‘abrones ¡ya los he visto antes!, así de jodidos vamos a estar dentro de diez años.
El Filósofo le dice:
–– ¡Compadre…es un espejo!