LO POLÍTICOS DE TODOS COLORES GUSTAN DE CACAREAR SOBRE «EL IMPACTO SOCIAL» DE LAS OBRAS Y ACCIONES QUE CON RECURSOS PÚBLICOS LLEVAN A CABO. Estas reflexiones son continuación de las referidas a la actividad de la Alcaldesa de Tlalnelhuayocan, pero se pueden aplicar al alcalde de XALAPA, o de cualquiera de todos los municipios de Mexico. Aclaraciones:
1o. En la realidad es incorrecto hablar sólo de «impacto social de obras y acciones de gobierno» cuando en la realidad todo interactúa y lo mismo se hay impacto social, económico que político.
2. Predomina el impacto social sobre los otros dos, cuando las obras y las acciones programadas y ejecutadas son el resultado de un proceso de planeación democrática, presupuesto participativo que recoge consenso y, además, cuenta con soporte jurídico y técnico de ordenamiento urbano y territorial, o sea todo lo contrario de lo que ocurre cuando la intención que gobierna las decisiones sobre distribución real de la inversión pública esta vinculada a la rentabilidad electoral y a proyectos personales, de partido o de grupo político. La articulación congruente Plan-Programa-Presupuesto, como entre Formulación, Ejecución, evaluación, cuenta pública, o Federación, estados y municipios, JAMÁS HA SIDO DEMOSTRADA.
3. En el discurso de los alcaldes puede argumentarse que se cumplió a pie de puntillas las etapas marcadas por la Ley de Planeación incluso de la nueva contabilidad gubernamental. Históricamente, desde tiempos del Ex Presidente Miguel de la Madrid, los contenidos de ese discurso fueron correspondidos sólo relativamente hasta la etapa de consulta y formulación del Plan mientras que la presupuestacion, ejecución y evaluación, en realidad se ha caracterizado por ser excluyente, autoritaria, unipersonal, y/o influenciada por opacas negociaciones partidizadas o con grupos de presión. Cuales obras y acciones antes de un proceso electoral y cuáles después es un asunto estratégico que ningún gobernante permite que «se le salga de las manos».
3. El análisis de contenido de la difusión o publicitacion de las obras y acciones de un ayuntamiento, gobernador o Gobierno federal NO DEJA MENTIR . Las obras y acciones tienen un autor principal o incluso paternalistamente único, o sea el Presidente Municipal, el Gobernador o el Presidente de la República, o la gestoria de un diputado o senador. Los resultados, los logros no son un producto institucional, de créditos compartidos porque a nadie corresponde en exclusivo el crédito que corresponde al esfuerzo de muchos. Tienen su responsabilidad los actores directos de la publicidad gubernamental – medios, reporteros, fotógrafos, columnistas, agencias de publicidad y funcionarios de la comunicación gubernamental. Queda demostrado este vínculo en el Compromiso del Presidente Peña Nieto en este tema. Compromiso aún pendiente y de pocas esperanzas de cumplirse ya que entra en abierta confrontación con históricas inercias de la movilidad del sistema político.