A partir de la Reforma Política impulsada por el Gobierno Federal encabezado por Enrique Peña Nieto, que dota a las Cámaras (Alta y Baja) del Congreso de la Unión de la figura y posibilidad de reelección, un tema, por cierto repudiado desde épocas históricas que sentó precedentes negativos por los regímenes dictatoriales que la reelección abrazó.

Recordemos que en términos políticos, la historia de las entidades federativas y los municipios y tras la lucha Revolucionaria, cuando Madero afirmó en el plan de San Luis la frase «Nunca más gobiernos perpetuos y ciudadanos oprimidos, mexicanos depongamos al dictador, Sufragio Efectivo, No reelección», posteriormente se conformó el Partido Nacional Revolucionario en el que los cacicazgos y líderes revolucionarios regionales fueron integrados y controlados por Plutarco Elías Calles, fue la fórmula que encontró el centro para controlar la barbarie y la violencia local en las entidades federativas.

Empero, a pesar del escozor que pueda generar esta figura electiva, la reelección cobra nuevamente vigencia en el ámbito político electoral, no solo a nivel de la competencia electoral federal, sino en los ámbitos locales en las 32 entidades de la República, y el distrito federal.

La reelección cobra relevancia pues para citar ejemplos tangibles, con la Reforma Política peña nietista se aprobó que los Senadores puedan ser reelectos hasta por dos ocasiones, y los diputados federales por cuatro periodos consecutivos. Y también tendrá aplicación en la asamblea legislativa del distrito federal.

Veracruz no permanece ajeno al sainete político electoral, en días pasados, el gobernador Javier Duarte de Ochoa turnó al Congreso del Estado la Iniciativa con proyecto de decreto que reforma y deroga diversas disposiciones de la Constitución Política de Veracruz, con la intención de homologar las elecciones federales con las locales en 2018.

Tal iniciativa, propone la creación de un periodo gubernativo transitorio de solo 2 años de vigencia, lo que ha causado un parte aguas entre los aspirantes a la silla grande del solar chico, y que de plano, se ha convertido en un puntilloso debate de críticas, por lo que los sombrerazos y jaloneos entre quienes apoyan la moción de un gobierno de 2 años y entre quienes la repudian, no se han hecho esperar.

Los que están en desacuerdo, argumentan que en un periodo gubernamental tan breve de dos años, no se puede plantear con seriedad un Plan Estatal de Desarrollo, lo que además va a generar incertidumbre en los empresarios inversores que no le verían viabilidad a un gobierno sin rumbo que no tendría tiempo para consolidar un desarrollo económico, político y social a plenitud en la entidad veracruzana, dado que los proyectos, planes, programas, obras que podrían generar beneficio a la población, no tendrían continuidad posterior a un periodo bianual de Gobierno.

Los inconformes e interesados en generar polémica, aducen también que la lucha entre partidos políticos será encarnizada, de descrédito y un rancio nivel, lo que además implicaría una fuerte sangría a las finanzas estatales, por el alto costo de las campañas políticas que generarían un impacto económico negativo en la entidad.

En esta andanada de críticas a la propuesta del Ejecutivo del Estado, se han sumado los Senadores Fernando Yunes Marquez, José Francisco Yunes Zorrilla y el choleño, Héctor Yunes Landa, además del Presidente Municipal de Boca del Río, Miguel Angel Yunes Marquez, y su padre el ex candidato del PAN a la gubernatura, Miguel Angel Yunes Linares, quien en días pasados publicó senda carta abierta en algunos medios de comunicación, para cuestionar la Reforma Política duartista.

Los detractores del clan Yunes, que apoyan el decreto que Reforma la Constitución Política para dar paso a un Gobierno transitorio de dos años, afirman que la quinteta de apellido de origen árabe, en la mezquindad política solo buscan su interés personal y de grupo. Y es que el activismo intenso mostrado por 3 de los 5 integrantes del clan Yunes por la gubernatura del Estado hacia 2016, (la que al parecer se les cebó) se ha visto frustrado dramáticamente.

Las limitaciones a las facultades meta constitucionales a la figura presidencial a partir de 1994, fueron asumidas por los gobernadores. El centro fue perdiendo el control sobre partes importantes del territorio, mientras que la ausencia de Estado de derecho, de transparencia y rendición de cuentas se fue convirtiendo en la práctica común de los gobernadores en importantes franjas del territorio nacional.

Lo cierto es que independientemente de lo que pase con la multicitada Reforma Política duartista, existe un marcado rechazo popular a todo lo que huele a política, que le ha pegado principalmente a los gobernantes en temas como la economía, la inseguridad, la corrupción, que ha generado una crisis de credibilidad generalizada de las clases populares que viven todos los días en permanente angustia por la supervivencia diaria y escépticos sobre un gobierno de dos años que finalmente traería provecho solamente a una élite política, ajena e indolente a los intereses de los ciudadanos de a pie.

Parafraseando a Miguel Alemán Velazco, que al final de su gobierno afirmara refiriéndose a los tiradores a la primera magistratura del Estado, que: “Cuando la novia es bonita, tiene muchos pretendientes”. Pareciera que los Yunes (rojos y azules) se desgarran las vestiduras por la principal silla del terruño chico.

EL PILÓN 1

Que don Pepe anda súper encabronado porque otra vez chamaquearon a su hijo-