El pasado lunes en este espacio abordamos el espinoso tema para la mayor parte de la erróneamente llamada “clase política mexicana”, del grave problema que afecta a nuestra nación: la corrupción y su lamentable consecuencia, la impunidad. El motivo, las ocho “acciones anticorrupción oníricas” que anunció con bombo y platillo el presidente priista Enrique Peña Nieto, con las cuales pretende lavar su deteriorada imagen y la de su señora esposa, Angélica Rivera, así como también de su secretario de Hacienda y Crédito Público, el campeón mundial de los titulares del ramo -según un pasquín británico- Luis Videgaray Caso.
Para reforzar las citadas acciones y darles la credibilidad y legalidad necesaria, Peña Nieto, resucitó a la Secretaría de la Función Pública (SFP), la que desde hace dos años no tenía titular, pues según informaciones que dieron a conocer integrantes del Senado de la República durante el mes de diciembre del año 2013, en esas fechas se aprobó en Comisiones la denominada Reforma Anticorrupción, organismo que a la fecha no se sabe qué pasó con éste, pero que estaba destinado a sustituir a la inútil SFP. Pero que desde la semana pasada está estrenando a su nuevo secretario, el joven Virgilio Andrade Martínez, hombre que se ha desempeñado en la administración pública nacional y que tiene relaciones muy estrechas con personajes del mismo ámbito, pero de una muy dudosa conducta y transparencia en su actuar, como lo es el dirigente del Sindicato Mexicano de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana, el cuestionando senador Romero de Champs.
Así pues, Peña Nieto, con estas acciones piensa que podrá limpiar la imagen de la pareja presidencial y de la parte de su gabinete que lo requiera. Pero lamentablemente eso se aprecia muy difícil, pues el citado nombramiento ha sido ya cuestionado no solamente a nivel nacional, sino también internacional, ya que surge la pregunta: ¿Qué tan imparcial podrá ser en sus investigaciones el Secretario de la Función Pública, si debe su magnífico empleo a quien debe de investigar?
Definitivamente las acciones de investigación que pueda llevar a cabo la renovada dependencia del gobierno federal, se ven muy sin credibilidad. Lo que permite a todos los mexicanos dudar de que la intención del Ejecutivo Federal, sea realmente en el sentido de aclarar la situación y llegar a la verdad. Lo que contrasta con las afirmaciones de los diputados del Partido Revolucionario Institucional y del Partido de la Revolución Democrática, en el sentido de que antes de finalizar el presente mes, sea votada la reforma constitucional que permita la creación del tan anhelado Sistema Nacional Anticorrupción, pero que tantas veces ha sido congelado en alguna de las Cámaras del Congreso de la Unión, por no convenir a los intereses de los servidores públicos de los tres niveles de gobierno de este país. Por lo que en esta ocasión se espera contar con el apoyo de los integrantes del Senado de la República y a la brevedad, trabajar con el Constituyente Permanente para lograr su aprobación. De ser esto posible, las acciones del Congreso de la Unión y de los estados del país, fijarían un precedente de gran importancia por lo que respecta a verdaderamente querer combatir la corrupción. Esperemos sea así. Hasta el viernes. noti-sigloxxi@nullhotmail.com