Este miércoles, durante la comida de cumpleaños de «Tito» Barquín» Gornés, el ex-alcalde de Xalapa, Enrique Hernández Crisanto (alguna vez en un evento internacional en esta capital, una señora se le acercó a preguntarle: ¿usted es el Presidente Zapatero, de España?»; «no, señora, disculpe yo soy de Xalapa, sólo que mi apodo es «zapatero»), dijo unas palabras por el acontecimiento, y expresó que «Tito» contaba con muchos amigos porque «es más atento que un recado». Y es verdad, qué importancia, en cualquier actividad que se realice, y en cualquier nivel de jerarquía de la dependencia (como dice Alejandro Montano: «un funcionario que no contesta el teléfono no es un buen servidor público») o empresa que se trate, es la de ser amable, atento, sencillo, y muchas actitudes positivas más que «adornan» la figura de una persona. Y que cada vez se les exige más a los políticos que buscan el voto popular en elecciones.