De singular relevancia fue la reunión que sostuvieron cirujanos plásticos de la entidad con miembros de la Comisión Permanente de Salud y Asistencia del Congreso local, para pedir la homologación de la ley estatal del ramo con la federal.
Como sabemos, durante las últimas décadas la cirugía plástica cobró importancia entre artistas de cine y televisión. Ellas y ellos viven de su imagen, además de tener los recursos para hacerlo. Muchas personas, en especial mujeres, empezaron a ser clientes del bisturí con tal de “levantarse” o “quitarse” lo que les incomodaba del cuerpo. No siempre con los mejores resultados.
Ejemplos de lo anterior sobran. Basta leer una revista de “los famosos” o las secciones policíacas o de nota roja de los periódicos del país, para darnos cuenta de cómo charlatanes de la medicina abusan de sus pacientes. Clientes, mejor dicho.
Recuerdo rápidamente cuatro ejemplos claros: Lucha Villa, Lucía Méndez, la señora Campuzano y Alejandra Guzmán. Todas ellas tuvieron problemas de salud por pésimas intervenciones quirúrgicas. En el caso de la primera, someterse a este tipo de cirugías acabó con su carrera de cantante vernácula.
Por supuesto que los cirujanos plásticos no sólo trabajan para hacer “bella” la figura, también hacen cirugías reconstructivas a personas que han sufrido accidentes y quedan con deformaciones corporales.
Pero regreso a la reunión entre médicos e integrantes de la Comisión de Salud, a quienes informaron de una situación grave, que pone en riesgo la vida e integridad de nuestros conciudadanos: “Los médicos dijeron tener conocimiento de que en Veracruz se han otorgado cientos de cédulas profesionales a egresados durante los últimos años, pero no se evalúa su capacidad ni a los profesores o los medios para realizar las prácticas obligadas.
“No obstante, recibieron quejas de jóvenes que terminaron la Maestría y nunca han operado: Son pocos quienes tienen la honestidad de admitir el riesgo que eso representa”.
Quienes denunciaron las irregularidades: el secretario del Colegio Veracruzano de Cirugía Plástica y de la Asociación Mexicana de Cirugía Plástica y Reconstructiva Militar, Hugo Gamboa Torales, y Martin Lira Álvarez, vocero y coordinador de la Asociación Mexicana de Cirugía Plástica Estética y Reconstructiva AC.
Les escucharon los diputados Gladys Merlín Castro, Joaquín Rosendo Guzmán Avilés, Carlos Ernesto Hernández Hernández y Leandro Rafael García Bringas.
De acuerdo con la información proporcionada por los galenos, en nuestro estado se atienden al año casi cien pacientes de cirugías mal practicadas –en el país son miles–, e incluso se ha registrado en algunos casos la muerte de quienes acuden a estas “clínicas” para “mejorar” su apariencia.
Sin duda hay mucho que hacer en este rubro, porque las convenciones sociales determinan qué es lo bello y qué no. Por supuesto, el sector más vulnerable a este tipo de condicionamiento es nuestra juventud.
Puedo decir cosas comunes como “la belleza es interna”, “lo que importa es sentirse bien”, etcétera. Lo fundamental es que cada uno cuide su salud, y si no está conforme con lo que tiene y quiere, someterse a una cirugía. Pero que verifiqué en quién o quiénes deposita su vida. No soy la indicada para dar consejos, pero sí para desearle una vida plena y llena de amor.
Por hoy es todo. Nos leemos en la próxima entrega y tenga un excelente inicio de semana.