Telares desteñidos por la crisis

Guatemala es bella e impactante a pesar de todos los problemas que abruman actualmente a la población de esa hermana república centroamericana que sufre un capítulo de incertidumbre y trae a todos con el Jesús en la boca. Los habitantes se quejan de la tremenda inseguridad pública que impide que la gente transite con tranquilidad en las calles. El índice de corrupción de los funcionarios gubernamentales es insoportable. Una muestra son las irregularidades destapadas en los últimos meses que desataron una crisis que llevó a la renuncia obligada de la vicepresidenta del país, Roxana Baldetti, quien ya arrastraba sospechas de un «enriquecimiento desmedido» desde su época como diputada y la gota que derramó el vaso ha sido el escándalo por su presunta participación en una red de corrupción aduanera.
En Abril de este año, funcionarios judiciales y un organismo avalado por la ONU desmantelaron una estructura criminal que recibía sobornos de importadores para evadir el pago de impuestos de aduana y la red, presuntamente estaba liderada por el hoy prófugo de la justicia, Juan Carlos Monzón, el ex secretario privado de la defenestrada Baldetti. Dos días antes de la renuncia de la vicepresidenta, la Corte Suprema aseguró que existían evidencias suficientes para retirarle la inmunidad y había aprobado un antejuicio para investigarla. En las calles de la capital, Ciudad de Guatemala, cientos de personas celebraron jubilosos la renuncia de Baldetti.
El grave caso involucra al presidente Otto Pérez Molina y a decenas de funcionarios. Varios ciudadanos llevaban desde el 1º de mayo días encadenados al Palacio Nacional de la Cultura para protestar, otros han bloqueado rutas y miles se han manifestado para pedir la renuncia del primer mandatario. Entonces, la circulación vehicular y e l tránsito se convierten en una pesadilla.
Arturo Matute, analista de la organización International Crisis Group en Guatemala, consultado sobre la situación política del país, calificó de “ extraordinario” el caso de la renuncia de Baldetti, pues «Aquí en Guatemala todo el mundo sabe que existe una corrupción gubernamental enorme y sin importarles que hemos sentido el peso de la estructura mafiosa era difícil hacer algo, hoy el hecho de que se esté revelando este caso con nombres y apellidos, con capturas; evidenciando con tanta claridad la corrupción y a tan alto nivel, es algo extraordinario», recalca.
Otros observadores coinciden en que el mandatario Otto Pérez Molina del Partido Patriota está arrinconado y en una situación comprometida. Por haber defendido férreamente a la vicepresidenta durante todo este tiempo, perdió credibilidad, además, su candidato a la presidencia de la república para las elecciones de septiembre próximo, Alejandro Sibandi, renunció al partido.
Hugo Novales, politólogo e investigador de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asies) opina: “el desgaste de la imagen pública del presidente es muy grande porque la vehemente e irracional defensa que hizo de la vicepresidenta Baldetti podría significar que está implicado en algunos actos de corrupción»
Son tiempos de campañas electorales, la ciudad está cubierta de estandartes y anuncios promocionales de los candidatos de diferentes partidos políticos para renovar en septiembre próximo los cargos de presidente, vicepresidente, 158 diputados al Congreso, 20 al Parlamento Centroamericano y 338 corporaciones municipales para el periodo 2016-2020.
En este caótico panorama, subyace el enorme enojo social de Guatemala: dirigentes de 72 organizaciones civiles anunciaron varios días de movilizaciones en la capital y en las cabeceras departamentales de todo el país, en rechazo a las “ilegítimas, ilegales y fraudulentas” elecciones generales del próximo 6 de septiembre y eso es porque, afirman que los comicios se realizarán en medio de una crisis política en la que los partidos, gobierno y tribunales “han optado por la impunidad y la corrupción” . Además, hay descontento social porque el Congreso guatemalteco no ha querido aprobar las reformas a la Ley Electoral y de Partidos Políticos, mientras las campañas proselitistas han violado la ley y “se financian con dinero del narcotráfico” y por eso, los dirigentes sociales exhortan a los guatemaltecos convocados a las urnas a que no voten o que anulen el sufragio.
La Asamblea Social y Popular (ASP) integrada por organizaciones campesinas, indígenas, académicas, religiosas, sindicales y civiles , quien exige la renuncia del presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina por las denuncias de corrupción y su responsabilidad en la crisis política, ha manifestado que las próximas elecciones de septiembre “no son la solución y sólo darán lugar a la elección de un gobierno y un congreso ilegítimo” y por ello convoca a una Asamblea Nacional Constituyente multisectorial y plurinacional que redacte una nueva Carta Magna.
Esta reportera caminó por las calles de Guatemala haciendo a un lado los consejos de evitarlo por la inseguridad y la delincuencia. Vi zonas residenciales, centros comerciales, casas y autos de lujo custodiados por grupos de guardaespaldas armados. Sin embargo, ni la crisis política y ni el miedo al crimen impidieron la grandiosa y emotiva celebración de la fiesta de la patrona capitalina, la virgen de la Asunción. Me cuentan que fue el 15 de agosto de 1983, cuando los católicos celebraron por primera vez a la Virgen de la Asunción, patrona titular de la Ciudad de Guatemala, cuyo nombre tiene su origen en el antiguo pueblo de la Ermita que tenía como patrona a dicha advocación.
A raíz de los terremotos de 1773 que destruyeron la antigua Capital del Reino de Guatemala, se decidió trasladar la ciudad a un nuevo asentamiento. Cuando el Rey de España, Carlos III, asignó el nombre a la ciudad, respetó el patronazgo de La Ermita, por lo que fue llamada Guatemala de la Asunción. A partir de entonces la fiesta de la ciudad ha sido en honor de la Virgen de la Asunción, y por coincidir con la fiesta del desaparecido pueblo de Xocotenango, la celebración se convirtió en una sola feria que ofrece variadas atracciones: desde juegos mecánicos, ventas de comida y dulces típicos mientras se conmemoran misas en la Catedral y en la Parroquia de la Asunción ubicada en la zona 2, además de procesiones de devotos acompañados de imágenes religiosas, música de bandas y marimbas, cohetes y flores.
La ciudad de Guatemala tiene un clima templado y llueve ligeramente por las tardes. En agosto es cambiante: Un día hay un sol brillante y otro, puede ser nublado y gris. El centro histórico está vacío y esa soledad da un aspecto lúgubre a su monumental arquitectura colonial. Ralean los turistas en su colorido y muy surtido mercado de artesanías donde destacan bellísimas piezas de telares de cintura bordados y tejidos con motivos representativos de cada región. Hay poca gente en las calles, acaso empleados que esperan ansiosos haciendo largas filas para tomar los repletos autobuses urbanos. Los guatemaltecos o Chapines (Gentilicio por antonomasia), son amables y alegres. Acostumbran una expresión muy linda : “ no tenga pena” a cada final de frase para sellar con su interlocutor algo así como: “no te preocupes”…
Es muy bueno e l café de Guatemala, tiene un perfecto equilibrio de sabor y aroma. Escuché en el vuelo de ida de Interjet (de Miguel Alemán), a productores cafetaleros que comentaban que la calidad del café de Guatemala era superior al colombiano y al mexicano y por eso cotizaba mejor en Europa. Las tortillas en este país son más pequeñas que las mexicanas y más gorditas. Las mujeres las hacen a mano y uno puede saborearlas con sus platillos típicos como es el delicioso Pepián que es un molito caldoso de gallina con chayotes y papas. Hay dos cervezas famosas: Gallo que es muy suave y Cabro más fuerte.
Guatemala es contrastante. Tiene unas zonas muy pobres donde el tiempo parece detenido. En otras, deslumbra la ostentación del crecimiento exponencial destinado al turismo extranjero y al desarrollo urbano residencial. Me comentan que aquí invierte también Carlos Slim y además, hay muchos negocios floreciendo con lavado de dinero. Es asombroso el ambicioso proyecto del Paseo Cayalá, ubicado en varias hectáreas de la periferia de la ciudad, construido con un enorme capital financiero que identifica a este país con un sofisticado concepto de modernidad y elegancia, asimismo hay en la Ciudad Capital otras atractivas plazas comerciales como Fontabella o Oakland con magníficos restaurantes, cafés, pastelerías tiendas y librerías cerca de la zona hotelera, situada hacia el final de la larga, bella y arbolada avenida Reforma.
Cerca de Guatemala, en el bellísimo pueblo Antigua, rodeado de cerros y volcanes, hay una terminal de llamativos autobuses de modelos discontinuados comprados en Estados Unidos y reacondicionados ornamentalmente, llamados , «chicken bus», o “parrilleras” que recorren los lugares más remotos del país. En las calles empedradas de Antigua hay muchas iglesias en ruinas y hermosas fincas con ventanas de herrería, techos de tejas y todas las bardas están rebosantes de bugambilias, sombreritos lilas, llamaradas y jazmines. De entre los 150 restaurantes que hay aquí, Fernando´s Kaffe localizado en la avenida 7 norte, produce un chocolate artesanal de excelente calidad en su propia fábrica. El pan que hornean en Antigua es muy bueno. También se encuentran varias joyerías y tiendas donde venden diferentes tipos de jade y llamó nuestra atención la tendencia a vender primorosos huipiles usados (vintage) que muchas mujeres indígenas -hoy madres o abuelas- bordaron con gran esmero y profusión, pero ante las necesidades económicas actuales, se han visto obligadas a deshacerse de esas valiosas prendas representativas, que poco a poco las nuevas generaciones (que estudian o trabajan en la localidad) han ido sustituyendo tímida pero irremediablemente por vestidos de calle o pantalones modernos y esos bonitos huipiles, ya quedaron como objetos de culto desgastados por el tiempo y aun así, son muy codiciados por turistas europeos que se los llevan como adornos.
Las mujeres guatemaltecas obtienen recursos de la venta de sus piezas textiles elaboradas en telares de cintura. Hacen, huipiles, caminos de mesa y rebozos bordados y tejidos con hilos de algodón o lana de colores brillantes. Es una sinfonía matizada por símbolos que representan volcanes, granos de café, maíz y, en los trabajos más elaborados y preciosos destaca el quetzal, esa ave mítica de Guatemala que – aseguran- vuela y anida en las selvas de Coban, municipio y cabecera del departamento de Alta Verapaz.
El quetzal, es también el nombre de la moneda nacional guatemalteca, que vale más que un peso mexicano. En las casas de cambio un quetzal cuesta 2.45 o 2.60 devaluados pesos mexicanos.
GUATEMALA, 16 DE AGOSTO DE 2015.