Frente a los numerosos desafíos del porvenir, la educación constituye un instrumento indispensable para que la humanidad pueda progresar hacia ideales de paz, libertad y justicia social.
Jaques Delors

La educación representa una poderosa palanca del desarrollo individual y social. Es factor de permeabilidad social. Proporciona las herramientas básicas para que las personas se puedan enfrentar con éxito al difícil panorama de la vida.
Nada es permanente excepto el cambio. Cuánta razón tenía Heráclito, todos los días cambian los mercados; la geografía política se modifica año con año; el valor del peso frente al dólar se deprecia a diario; las tecnologías de la información avanzan hacia el Internet de las cosas; y, lo que hoy parece novedad, mañana sufrirá de obsolescencia. Pero, ¿la educación superior universitaria y la tecnológica están cambiando?
Incremento de la cobertura
En los últimos diez años la matrícula de educación superior en el país tuvo un incremento considerable. En el ciclo escolar 2005-2010 la cobertura era sólo de 25.2 por ciento, y para el ciclo escolar 2013-2014 incrementó a 34.1 por ciento, aunque la meta es llegar a 40 por ciento en 2018.
Según los datos de la Secretaría de Educación Pública, en Veracruz la cobertura de educación superior, incluyendo posgrado, de la población de 18 a 24 años fue de sólo 20.6 por ciento, para el ciclo escolar 2013-2014. Por lo que se requiere un esfuerzo conjunto y coordinado de todas las instituciones públicas y privadas para elevar este indicador.
La oferta de educación superior en la entidad es reconocida por su calidad. Sin embargo, falta mucho por hacer, como lograr la certificación de los procesos y servicios educativos; promover la acreditación nacional e internacional de los programas de estudio; fortalecer la vinculación con los sectores público, privado y social; mejorar la enseñanza de un segundo idioma; evaluar las competencias de los egresados; También se requiere optimizar la infraestructura educativa instalada; asegurar la retención de los estudiantes; facilitar el acceso a las personas con capacidades diferentes y grupos vulnerables; e implementar un sistema integral de la calidad.
Mejoramiento de la calidad
Fernando Reimers, director de Educación Global y de la Política Educativa Internacional en la Universidad de Harvard, señala que los egresados de educación superior exitosos son aquellos jóvenes que tuvieron alguna experiencia laboral antes de egresar y participaron en actividades de tipo social o religioso.
Cuando visité las Universidades Técnicas de Múnich y de Berlín en Alemania, observé con gran interés el Programa Dual, donde los estudiantes acuden a una empresa dos días a la semana y los otros tres asisten a las aulas de la escuela. Esta experiencia le permite a los jóvenes desarrollar sus competencias profesionales más allá de solo atender una necesidad real de empleo, sino que este tipo de formación integra el conocimiento y las habilidades con la adquisición de la experiencia necesaria para el ejercicio de una profesión.
En México, el Colegio Nacional de Educación Profesional (CONALEP) lo aplica desde 2009. Este modelo educativo tiene como objetivo lograr un equilibrio armónico entre la formación teórica y la práctica, por lo cual alterna un periodo de formación en el aula con el espacio del trabajo.
El ex rector del Tecnológico de Monterrey, Rafael Rangel Sostmann, en su libro Educación 2.0, sostiene que el gran desafío de la educación universitaria es lograr que los alumnos no sólo sean excelentes profesionistas, sino ciudadanos comprometidos con el desarrollo de sus comunidades y del país.
Si se logran impulsar políticas públicas para profundizar la igualdad de oportunidades educativas, con equidad y calidad, es muy probable que el futuro será mejor y es factible que esto contribuya a que en Veracruz y en todo el país se viva en paz y libertad.