Los africanos David Tomas, están en esta ciudad, y no precisamente porque sean parte del llamado “turismo electoral”, no informan cómo llegaron, lo que sí dan a conocer es que buscan empleo para quedarse aquí, esto sin haber bebido la famosa agua de Temoyo, toda vez que esos manantiales con cristalinas aguas arraigadoras, se extinguieron hace décadas.
Con un español mal expresado, pero con el entusiasmo reflejado en sus jóvenes rostros, coincidieron en decir, al tiempo de ofrecer en venta rebanadas de pay de queso: “No desconfiar, nosotros querer trabajar en México, aquí en sur de Veracruz nos gusta mucho”.
Indican que quieren trabajar como obreros generales, ya que saben de industrial de la construcción, aunque también hablan inglés y otros idiomas, las rebanadas de pay de queso las ofrecen en 20 pesos, pero no falta quien sólo les ofrece 15, y ellos aceptan gustosos, puesto que es más importante no dejar ir a un cliente.
Encontrándose con su vendimia enfrente del palacio, algunas personas del público, un poco por curiosidad y otro poco por conocer el sabor de su repostería, dialogaron con ellos y les pidieron el número del único de teléfono móvil que los dos traen.