Con la finalidad de evaluar los niveles nutricionales de la población escolar veracruzana, el Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) se suma al Programa Nacional de Registro de Peso y Talla, que contempla el registro de niñas y niños de primero a sexto grado de primaria de todas las escuelas públicas y privadas para conocer su situación en el rubro nutricional.
Para dar cumplimiento con los lineamientos que promueve el DIF nacional, el organismo coordinará las acciones con los 212 sistemas municipales, las secretarías de Salud (SS) y de Educación de Veracruz (SEV), para tener una cobertura completa del sector infantil.
El auditorio del Centro de Rehabilitación e Inclusión Social del Estado de Veracruz (CREEVER) fue el escenario de la primera capacitación sobre esta estrategia en la que participó personal de Educación, Salud, el Consejo Nacional de Fomento Educativo (CONAFE), la delegación veracruzana de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI) y otros programas que abaten la obesidad.
La inducción estuvo a cargo de la Unidad de Atención a Población Vulnerable del Sistema Nacional DIF, que explicó detalladamente el proceso y las formas de cómo se obtendrá el diagnóstico de las niñas y niños, focalizando a los que padecen de algún problema alimenticio.
Asimismo, se dio a conocer la importancia de obtener y llevar un censo de los datos a través de una plataforma en línea, que permita compartir la información oportunamente con otras entidades e instituciones que trabajen en favor de este sector.
Por su parte, la investigadora y representante de la Dirección de Nutrición del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, Liliana Juárez Martínez, mostró los formatos para capturar la información censada, el Sistema de Vigilancia Nutricional en Escolares; la báscula y la técnica para la toma de peso; el estadímetro de polipapel y la técnica para la toma de talla.
Con esta capacitación se busca obtener un marco de referencia nutricional obtenido del esfuerzo en conjunto, por lo tanto, se realizará una segunda inducción que iniciará a partir del mes de abril, a fin de beneficiar a toda la geografía veracruzana.
Gracias al apoyo de la población, se puede prevenir que las niñas y niños padezcan cualquier enfermedad a futuro a causa de una mala alimentación; de esta forma, es necesario que desde la educación en casa se tomen medidas que contribuyan al buen funcionamiento de los procesos nutricionales, para vivir mejor y gozar de una salud plena.