Estaba en el Congreso y alguien lo señaló.
Alto, de traje con buen corte… No lo conocía personalmente pero ya me habían hablado de él.
En esos tiempos, yo traía una cámara digital, la desenfundé y como no le había tratado nunca, le dije (o pedí) que le iba a tomar una foto. Se paró y dejó que la tomara. Acto seguido me preguntó mi nombre y entonces me identificó. Ahí descubrí que los cisnes también tienen colmillo, largo y retorcido. Me dijo que había dos blogs que leía todos los días: el de Jesús Silva-Herzog y el mío.
Así fue que conocí a Alberto Silva Ramos y llevábamos una buena amistad hasta que tuvimos una diferencia.
II
El arribo tan cacareado de Alberto Silva Ramos, el Cisne (para estar a tono en el asunto de plumíferos), a la Coordinación General de Comunicación Social de Gobierno del Estado, es tan polémico como el mismo personaje.
Recuerdo que cuando alcalde, allá por el 2011, tomó una decisión que si en esos tiempos hubieran transmitido “House of Cards” o “Scandale”, cualquiera hubiera dicho que de esas series se inspiró para resolver un ataque mediático que pretendían hacerle por un asunto privado y volverlo público. Pero no… me gustó la forma en que lo trató que hasta le dediqué unas líneas:
“Los argumentos que da Alberto Silva para haber actuado contra quienes se supone pretendían extorsionarlo, no les veo vuelta de hoja: ‘un bebé no puede ser objeto de extorsión’.
Alberto Silva Ramos es, creo, como nos gustaría que fuera el resto de los políticos: humano. Exhibe virtudes y a la vez defectos”… como usted, como yo…
III
Alberto Silva Ramos vuelve a la Coordinación General de Comunicación Social. Su trabajo en el pasado inmediato, era de dos caras: a algunos agradaba el ánimo contestatario, agresivo, al tú por tú, cuando de hacerla de vocero se trataba… por supuesto, hubo otros que no, que rechazaron ese estilo que, siendo francos, pocas veces se vio o ha visto en un Coordinador de Comunicación Social.
A como están las condiciones y cerrando el sexenio, es seguro que el trabajo de Alberto Silva no se acerque al que hizo en su momento como Coordinador o Vocero… va a ser fiel a su estilo, ¡pero al doble! ¡doblemente polémico! ¡doblemente agresivo! ¡doblemente contestatario!
Pero no por esas actitudes es que tuve una diferencia con Alberto Silva Ramos… y es que a pesar de que el Cisne es un priista recalcitrante, tiene sangre azul… ¡le va a la máquina celeste y yo al América!
Y sí, Alberto Silva puede tener muchos defectos y virtudes, desde la perspectiva que se le quiera ver, pero no recuerdo ninguna ocasión que haya objetado líneas, señalamientos, ideas expresadas en el ejercicio de la libertad de expresión, lo que me lleva a considerar que, acá entre nos, mil veces un Pavón, mil veces un Cisne, que una sola vez ¡una Ga-Gina!
Envidia o codicia en CMAS
En lo particular, descarto los calificativos como déspota, prepotente, arrogante, y voy directo a la carnita. Es el caso de Jorge Guzmán Delgado, gerente de Finanzas y Control Presupuestal de CMAS, aunque muchos en ese lugar lo vean más como el “dedo chiquito” de Carlos Hernández, titular de dicha Comisión…
Una de dos: O Jorge Guzmán Delgado es víctima de la envidia o es víctima de la codicia.
Digo, en la CMAS, para nadie pasa desapercibida la camioneta de medio melón que se acaba de estrenar el funcionario… lo que bien puede provocar envidia natural, pero también puede hablar de la generosidad de Carlitos Hernández en el salario de su “dedo chiquito”.
Claro que también están los malpensados que nunca faltan que ya ven la oficina de Finanzas y Control Presupuestal de CMAS, al estilo Mecano con uno de sus éxitos: “¡Maquillaje!”, pero sobre las cuentas que con sombra aquí y sombra allá, van encuadrando.
Insisto: en lo particular, a mí no me interesa si el funcionario es mamila si demuestra capacidad, pero si de acuerdo a lo que viven los empleados de CMAS, si es lo uno y no lo otro, por decencia y como favor a Carlitos Hernández, a quien me ha tocado ver acá en Jardines de Xalapa fletándose con las quejas de vecinos, debería ayudarle… no estorbando.
smcainito@nullgmail.com