El presidente de la FIFA, el suizo Gianni Infantino, rechazó hoy haber participado en operaciones ilícitas con una empresa involucrada en el FIFAGate, tal como se desprende de las nuevas revelaciones de los Panama Papers divulgadas por distintos medios.
“Estoy consternado, no voy a aceptar que mi integridad sea puesta en duda por cierto sector de los medios. La UEFA ya ha divulgado en detalle todos los asuntos relativos a estos contratos”, señaló Infantino en un comunicado emitido hoy por el ente rector del fútbol.
“Como se ha repetido en varias ocasiones a los medios, nunca se ha sugerido que nada incorrecto tuviera lugar. Estas explicaciones se dieron a los medios de una forma clara, razonable y perfectamente transparente”, ha afirmado la UEFA en un comunicado, después de medios ingleses hayan vinculado a Infantino con la firma de un contrato con una empresa que figura en la filtración de documentos del bufete Mossack Fonseca en Panamá.
En el mismo ha señalado que “por ello es todavía más reprobable que pese a las explicaciones dadas, ciertos sectores de la prensa hayan elegido tergiversar las cosas y confundir al público sugiriendo o dando por implícito lo contrario”.
La UEFA ha aclarado que después de “realizar una revisión completa de sus contratos comerciales, en lo que se refiere a este particular contrato de televisión en Ecuador que se remonta a 2006, cabe señalar que los derechos en cuestión se adjudicaron a una licitación realizada por TEAM Marketing, actuando en nombre de la UEFA”.
“Los derechos fueron adjudicados a Teleamazonas/Cross Trading porque hicieron la mayor oferta en el mercado”, ha concretado la UEFA. Dicha empresa, según la filtración de documentos, está registrada en el paraíso fiscal y es filial de otra propiedad del argentino Hugo Jinkis, uno de los implicados en el escándalo de corrupción en la FIFA junto a su hijo.
“Para que conste, ni la UEFA ni Gianni Infantino nunca han sido contactados por las autoridades en relación con este contrato en particular. Por supuesto, si la UEFA es contactada por cualquier razón, entonces estará más que dispuesta a cooperar”, ha destacado la UEFA.
La federación europea ha mostrado además su malestar por “la forma en que esta historia ha sido tergiversada por los medios de comunicación” y ha defendido la integridad y profesionalidad de quien hasta hace poco más de un mes fue su secretario general.
“La UEFA desea dejar constancia que Gianni Infantino ha sido un destacado miembro del personal de la UEFA durante muchos años, un hombre que siempre ha actuado con total profesionalidad e integridad, y que este intento de desacreditar su persona y la reputación de la UEFA, no está basado en absolutamente en ninguna prueba, y que no solo es un día triste para el fútbol, sino también un día triste para el periodismo”, ha defendido
En su texto la UEFA ha querido aclarar que hace tiempo fue preguntada por “si tenía algún tipo de relación comercial con ciertas empresas y/o personas nombradas en la acusación de Estados Unidos” y que su primera respuesta “fue inicialmente incompleta”, porque no tuvo “la oportunidad de comprobar cada uno de los (miles) de contratos comerciales que tenemos y por lo tanto la respuesta fue inicialmente incompleta”.
“Por esa razón Gianni Infantino inicialmente pensó, basándose en la información proporcionada por la UEFA, que no había contratos previos de la UEFA con ninguna empresa y/o persona nombrada en la acusación”.
Finalmente la UEFA ha reiterado su disposición “a dialogar y a explicar toda la información pertinente a los medios de comunicación sobre este o cualquier tema”.
Según La Nación, Infantino, quien entonces era director de Asuntos Legales de la UEFA, avaló con su firma la venta de los derechos para transmitir en exclusividad las competiciones europeas en Ecuador entre 2006 y 2009 a la empresa Cross Trading, que tiene sede en el paraíso fiscal de Nieu y es filial de Full Play, la firma de los Jinkis apuntada en el FIFAGate.
El primer contrato se rubricó el 13 de septiembre de 2006 en Suiza por un valor de 111 mil dólares por la transmisión de la Liga de Campeones, según el Süddeutsche Zeitung. En el segundo contrato, firmado en marzo de 2007, la UEFA vendió a la misma empresa los derechos de la Liga Europa y la Supercopa europea por 28 mil dólares.
“Meses después, los empresarios argentinos revendieron los mismos derechos a la señal Teleamazonas por más del doble: 437 mil dólares”, señaló La Nación. Según Süddeutsche Zeitung, la cifra se divide en 237 mil dólares por la Champions y 126 mil por el resto de los torneos.
Según el diario argentino, sin embargo, ese no es el primer vínculo comercial entre los Jinkis y la UEFA. “El mecanismo era una repetición exacta de lo que había sucedido con el período 2003-2006. En esa ocasión, los Jinkis le vendieron los derechos a Teleamazonas por 400 mil dólares más otros 40 mil dólares de costos técnicos”, indica la información.
Infantino rechazó hoy haber tenido vínculo personal con los Jinkis. “Nunca he tenido trato personal con Cross Trading ni sus dueños. El proceso fue conducido por el equipo de marketing en representación de la UEFA”, explicó el jefe de la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA).
“Ni la UEFA ni yo hemos sido contactados jamás por las autoridaes en relación a estos contratos particulares. Más aún, como los mismos medios informan, no hay ningún indicio de nada ilícito que hayamos hecho la UEFA o yo en este asunto”, agregó.
Infantino asumió el comando de la FIFA el 26 de febrero pasado en medio de la crisis más grave de la historia de la entidad, salpicada en los últimos tiempos por numerosos escándalos de corrupción.