Un total de 33 artesanos cumplirán un año de que fueron reubicados por el Ayuntamiento en un edificio que carece de energía eléctrica, agua y entre otras obras. Los vendedores insisten en que sus ventas decayeron casi en su totalidad desde que los alejaron del primer cuadro de la ciudad.
El secretario general del mercado de Artesanías de Papantla, Narciso Hernández Jiménez explicó que los locales permanecen en penumbras desde junio del año pasado, y el vital líquido les surten cada ocho días a través de una pipa.
También solicitaron los permisos respectivos y trabajos de impermeabilización, colocación de señalamientos viales y ampliación de los locales para almacenar sus mercancías que van desde ropa, mantas, bordados tradicionales y prehispánicos, así como pintura en barro y tallados en madera.
Son 37 locales que les construyeron; algunos están desocupados, otros permanecen cerrados con telas, y los pocos abiertos no tienen clientes, refirieron los dueños de los negocios, quienes insistieron en que sus establecimientos no tienen luz; sólo en los pasillos que unen los dos pisos.
Narciso Hernández Jiménez comentó que también les prometieron campañas de promoción del mercado de artesanías, pero les incumplieron. Al lugar casi no arriban los turistas a esta plaza comercial, ubicada entre las calles Francisco I. Madero esquina con Benito Juárez, de la colonia Centro.