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Agencia Imagen del Golfo

Vendedores de pan de la ciudad expresaron su preocupación de que ahora el ayuntamiento vaya contra ellos, pues algunos han sido avisados por las autoridades de Comercio que ya no tendrán permiso para expender en Orizaba.

Un comerciante que fue entrevistado, comentó que desde hace años él se dedica a esta labor, tiempo en el que ha pagado un permiso ante la autoridad municipal; sin embargo, en días pasados le fue informado que ya no se lo renovarán porque ya no se permitirá la venta en la ciudad.

“Yo pregunté que por qué ya no, me dijeron que eran las órdenes, pero yo digo, ya no dejan vender a nadie aquí, primero a los de Ixhuatlancillo, ahora a nosotros, y de qué vamos a vivir”, comentó el vendedor.

En el mismo sentido se expresó otra vendedora, de nombre Angélica, quien tener entre ocho y diez años de vender pan en su triciclo en Orizaba, quien comentó que se enteró de esa situación a través de otros compañeros, aunque en su caso no se lo han mencionado.

“Me han dicho que a muchos compañeros ya les han dicho lo mismo, que ya no se va a poder vender pan”, indicó.

La comerciante explicó que el pan que ella vende lo elaboran familiares, y ya el producto también lo salen a comercializar varios de la misma familia, que han hecho de este negocio su fuente de ingreso.

Expresó su preocupación por esta situación, ya que los vendedores no andan en el centro, sino en todas las colonias, como para que les prohíban su actividad.

Los comerciantes confiaron en que esta situación se aclare y no sea una medida que pretenda aplicar el ayuntamiento, pues la situación es muy precaria como para dejar sin un ingreso a muchas familias.

Esta situación fue desmentida por el director de Desarrollo Económico del ayuntamiento, Raymundo Reynoso Limón, quien descartó esa situación y pidió a los vendedores de cualquier giro que se acerquen a la dirección a su cargo cuando les lleguen rumores de este tipo para que les puedan aclarar la información.

Comentó que hay un padrón de aproximadamente 120 vendedores de pan registrados en el ayuntamiento, número similar a los tamaleros, que son los frupos más númerosos de vendedores.