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Fuente:
Liverpool, Inglaterra

Aimee Rouski es una chica de 19 años, originaria de Liverpool, Inglaterra, que está causando controversia por compartir varias selfies en su cuenta de Facebook, las cuales muestran que no es una adolescente como las demás.

Cuando tenía 11 años, Aimee fue diagnosticada con la enfermedad de Crohn la cual se caracteriza por causar inflamación en el tubo digestivo que puede provocar cáncer de colon y pérdida del intestino grueso, como fue el caso de la joven.

Esta enfermedad autoinmune no tiene cura y los síntomas que advierten de ella son:

  • Diarrea sola o con sangre
  • Dolor abdominal
  • Fiebre
  • Fatiga extrema
  • Pérdida de peso

Ante la pérdida del intestino, colon y los músculos de las piernas, los médicos le colocaron a Rouski una bolsa en el estómago, la cual comparte en las redes sociales con el fin de concienciar sobre la magnitud del problema y fomentar que se pierda el miedo de exhibirse y se hable del tema.

“Primero que nada, tengo la enfermedad de Crohn, la cual es incurable y casi me ha provocado la muerte, no es sólo un dolor de estómago, como la mayoría de la gente piensa. La enfermedad me ha dejado con una ileostomía permanente, sin intestino grueso, colon, recto, ano y los músculos internos del muslo, ya que se utilizaron para la cirugía plástica en mis heridas”, escribió en sus publicaciones.

Rouski señala que a pesar de todo lo que ha pasado, ya no siente vergüenza por mostrar la bolsa de su estómago ni de hablar públicamente de ello por lo que ahora comparte en fotografías para mostrar cómo es que vive así como sus aparatos médicos y cicatrices.

“He querido hacer esto porque he visto muchas publicaciones sobre la pérdida de peso, pero no tantas acerca de las discapacidades y enfermedades invisibles”, indica.

Aimee sabe que a muchas personas les afecta vivir en la misma condición, por lo que les envía el siguiente mensaje:

“Nadie lo sabrá a menos que tú les digas. Las personas que conoces todavía te amarán y te van a seguir encontrando hermosa. La enfermedad no es algo de lo que haya que avergonzarse”, subraya.