Cuando nos duele la cabeza por lo general nos vamos hacia las aspirinas o si de plano es muy fuerte, hacia el Tylenol; según estudios, este acetaminofeno en cantidades un poco más sustanciosas, tiene la capacidad de disminuir nuestra empatía y reducir nuestra percepción del dolor de otros.
De acuerdo con información de SDP Noticias, según investigadores de la Universidad Estatal de Ohio, el hecho de consumir más de mil miligramos de acetaminofeno, el ingrediente del Tylenol que alivia el dolor, hace que nuestro cerebro reprima su actividad en dos partes; la Ínsula anterior y la corteza cingulate anterior dorsal. Ambas son responsables por la sensación y la reacción emocional ante el dolor, por lo que literal te vuelves un insensible a lo que ocurre a tu alrededor.
El grado en que la sustancia puede disminuir esta capacidad varía dependiendo de la persona y la situación. No borrará por completo tu empatía, pero podría evitar que te identifiques con los problemas de otros. Por ejemplo, en vez de preguntarle a tu compañero de trabajo cómo él y su familia están tomando la pérdida de un ser querido, podrías estar más inclinado a simplemente decir “lo siento por tu pérdida” y luego continuar con tu vida como si nada o sea, ser un total insensible.
Los investigadores llevaron a cabo dos experimentos, el primero que involucran a 80 estudiantes universitarios. Al principio, la mitad de los estudiantes bebían un líquido que contenía 1.000 mg de Paracetamol, mientras que la otra mitad bebió una solución de placebo que no contenía fármacos. Los estudiantes no sabían a qué grupo estaban.
Un segundo experimento analizó a 114 estudiantes universitarios. Tal como en el primer experimento, la mitad tomó acetaminofeno y la otra el placebo.
En una parte del experimento, los participantes recibieron cuatro explosiones ruidosas que variaban entre los 75 y los 105 decibelios, para después evaluar las explosiones de ruido en una escala de 1 (no desagradable en absoluto) a 10 (muy desagradable).