El Estadio Azul será demolido en 2018 para dar paso a un complejo que albergará una plaza comercial y un hotel. Cosío Family, conjunto empresarial propietario del inmueble, optó por derrumbarlo ante la negativa del Cruz Azul para renovar su contrato de arrendamiento.
De acuerdo con el Diario Récord, un nuevo acuerdo implicaba que la escuadra pagara más por la renta de su actual casa y por ello se negó a aceptarlo, sin embargo deberá pagar una multa por el concepto de no renovación.
Tras la decisión de La Maquina y sin otro equipo deportivo en la Ciudad de México capaz de pagar por su uso, los dueños del recinto decidieron dar un giro a ese espacio. Por lo que el Estadio Azteca, será nuevamente su hogar, donde compartirá la localía con el América.
El proyecto que se edificará en el lugar contará con una plaza comercial debajo de un hotel de 220 habitaciones. Grupo Hotelero Las Brisas, propiedad de la familia Cosío, será el encargado de construir y operar el complejo.
A diferencia del Azul y pese a su antigüedad, el edificio ‘hermano’, la Plaza de Toros México, no desaparecerá; su dueño, Antonio Cosío Pando, tiene un fuerte vínculo sentimental con el coso y prefiere conservarlo.
Tanto la Plaza de Toros como el estadio de futbol eran las piedras angulares de la ‘Ciudad de los Deportes’, proyecto de la década de 1940 para conformar una gran área de práctica deportiva para la capital, el cual no pudo ser concretado.