+ “Te amo, cuida a mis princesas, la quincena está depositada”. Mensaje del soldado Cristian a su esposa, antes de morir emboscado.

+ En Jáltipan, Veracruz, sepultaron a la estudiante Génesis Deyanira, su madre, Ramona, al pie de su tumba, imploró: “Hija, yo hice todo por rescatarte viva y no lo pude lograr”.

Es este el México real en que vivimos.

¿Y QUIÉN ES ESE SEÑOR?

Un amigo defeño, lector consuetudinario, reclamó que no había escrito nada del aniversario de Francisco Gabilondo Soler, el famoso Cri Cri, el Grillito Cantor. Le dije que el Ayuntamiento orizabeño le había efectuado homenajes y que en esta ciudad, que ahora es Pueblo Mágico, a cada paso se encuentra algo relacionado con el compositor de música que cantó para generaciones de niños, a quienes a muchos destetaron escuchando sus temas clásicos. Es más, en la Alameda de Orizaba, llamada Francisco Gabilondo Soler, hay personajes de su música y una estatua que fue donada en su tiempo por el primer Azcárraga, don Emilio Azcárraga Vidaurreta. Cuando un grupo de orizabeños, creo que en el tiempo del alcalde Humberto Gutiérrez Zamora, el famoso ‘Pata de Leche’, basquetbolista de por vida y organizador de los juegos infantiles y juveniles nacionales, un buen hombre, un hombre muy querido, que por circunstancias de la vida llegó a ser alcalde de Orizaba. Honesto. En plena administración pedía préstamos personales, porque era de esos alcaldes que no le metía mano a la caja de la tesorería, de esos ya no hay. Gutiérrez Zamora, de familia de prosapia, descendiente de aquel general, Manuel Gutiérrez Zamora, gente del gran Benito Juárez, que llegó a gobernador por sus méritos revolucionarios. Gobernador de Veracruz en forma interina, en 1856; más tarde, en 1857, fue electo gobernador constitucional, cargo que desempeñaba cuando murió, el 21 de marzo de 1861. Su descendiente, Humberto y un grupo de orizabeños, creo que ahí iba José Luis Reneaum, periplaron a Chapultepec 18, casa y sede de aquel Telesistema Mexicano, antecedente de Televisa, allí don Emilio les ofreció una estatua, también creo que del gran escultor Humberto Peraza (todo lo creo, porque no tengo la seguridad, pero creo que así fue) y les dio para el camión de regreso y las tortas, porque ese grupo era tan honesto que apurado llevaban para viáticos. En la Alameda vive Cri Cri, y los domingos su música suena. Son domingos familiares de convivio, donde su estatua ve mirar y pasar a todos esos niños que les cantó de por vida, de su vida. Hay también junto a su casa, un parque con sus recuerdos. Es cierto lo que dice el amigo defeño, que hay que hacer cantar a los niños esa música, que ya se está olvidando, pero eso es más tarea de Aurelio Nuño Mayer (Si es Mayer es bueno), el secretario de Educación, hacer que en las escuelas kínder adopten y toquen su música los lunes, como si fuera una materia o después de los honores a la bandera. La historia de Cri Cri es la historia musical de varias generaciones, no dejemos que muera. Va.

NECIO DE MARIA

Aguas, una nota sorprende, la semana pasada se postuló una planilla para dirigir el COM (Comité Olímpico Mexicano), donde quien decidía el que entraba y presidía, era don Mario Vázquez Raña (Q.E.P.D.), siempre al frente del Comité Olímpico Mexicano. Pero ahora no, los cabos andan sueltos y el jalapeño, Carlos Padilla, actual presidente pretende, para no borrar la costumbre, reelegirse por quién sabe cuántas veces. Todos sabemos que el deporte olímpico es un fracaso, y el amigo del presidente, Alfredo Castillo, director de la CONADE, quien se excusa que ellos solo ponen dinero a las federaciones, es el mejor ejemplo de que a Los Pinos el deporte les importa una pura y dos con sal. Donde se ve riesgoso y amenazante, es que en la planilla de postulación llevan como prospecto en el segundo sitio, como vicepresidente primero ¿A quién creen? A ese mismo, Decio de María, el hombre que ha tirado por la borda al futbolista mexicano, y que desde la Femexfut, él y el otro inútil de Guillermo Cantú y Justino Compean, forman una tripleta mala, pésima para los futbolistas mexicanos, cuando han permitido que extranjeros naturalizados y no naturalizados entren a jugar, ha habido casos que solo en el juego hay uno o dos mexicanos alineando. Por eso, cuando vamos a eliminatorias y a Mundiales apretamos aquellito. Decio de María seguro con el jalapeño Padilla hunden más el deporte olímpico. Decio es como Atila, donde pisan él y su caballo no crece la hierba. La llamada Ley 10-8 permite que cada equipo tenga 10 extranjeros naturalizados y 8 mexicanos al grito de estoy quedando fuera. América tiene 11 extranjeros, Pumas y Tigres 10. Ha habido juegos donde solo un mexicano está en el campo. Es muy sencillo, van a Relaciones Exteriores y se naturalizan, y como este es el país donde todo se puede, pues ya vas, en mexicano balín te convierto, como Mandrake. Eso lo permitió el ‘tonto inútil’ de Decio de María, y ahora lo lleva Padilla a contaminar a los deportistas olímpicos. Y uno lo ve en la tele todo cínico, defendiendo hasta al entrenador del 7-0, el otro inútil, Juan Carlos Osorio (regresen al Piojo, aunque madree a Martinolli), que si usted ve jugar a los mexicanos juegan horrible, ganan pero no convencen, y la tripleta De Maria-Compean-Cantú, sonriendo sus sinvergüenzadas, porque se saben apoyados por Azcárraga y Televisa, que son en realidad quienes manejan a los clubes del fútbol en México. Ellos y nada más que ellos han hecho posible que México no llegue al Maldito Quinto Juego en un Mundial, por eso, por llenar a los equipos de extranjeros, la mayoría de ellos malos, que ni uno pertenece a su selección, quitando dos o tres excepciones.

Visítenos: www.gilbertohaazdiez.com