Allá por 1986, los diputados locales Jorge Moreno Salinas y Francisco Mora Domínguez fueron a Salamanca, España, para sondear las posibilidades de que las ciudades de Xalapa y Salamanca se hermanaran. Encontraron buen ambiente para ello y se lo comentaron, a su regreso, al alcalde Manuel Fernández Avila. Este dispuso, tiempo después, que el Secretario de Ayuntamiento, Francisco Loyo Ramos (QEPD) y otros colaboradores y empresarios xalapeños, viajaran a esa ciudad española, con la circunstancia que encontraron que el alcalde del PSOE que había realizado el compromiso, ya había sido relevado por un derechista millonario, quien los invitó a cenar a su castillo, pero finalmente no se pudo concretar el hermanamiento de las ciudades, aunque sí se realizó el de las respectivas universidades.