Lugar:
Fuente:
La Jornada

«Como en tiempos de (Plutarco Elías) Calles, hoy enfrentamos ataques populistas y demagogos de expresiones radicales tanto de izquierda como de derecha», afirmó Aurelio Nuño, secretario de Educación Pública, quien también se pronunció contra los caudillos.

En el Monumento a la Revolución, aseguró que «la derecha radical busca recuperar privilegios perdidos y sobreponer intereses particulares al bien común; de la misma manera, la izquierda radical busca destruir lo que tanto trabajo nos ha costado construir a todos como nación».

Al participar como orador único en el 71 aniversario luctuoso de Calles, organizado por el PRI, Nuño llamó a enfrentar esos embates con la unidad nacional y la reconciliación entre los mexicanos.

Mencionó que para tener una democracia de calidad «se necesitan instituciones fuertes y no caudillos», y recordó que Calles advirtió la amenaza que éstos representan cuando se imponen a las instituciones.

En su discurso, Aurelio Nuño reconoció que «el entorno internacional es complejo y volátil, afectando las relaciones internacionales, la estabilidad monetaria y las finanzas públicas».

Así como también la caída en los precios del petróleo implica restricciones presupuestales importantes.

Sin embargo, subrayó que Peña Nieto ha sabido crear las condiciones para hacer los cambios que exige el siglo 21.

«Hoy como ayer, ante turbulencias internas y externas, la pedagogía que nos dejó el general Calles es que frente al deterioro de las instituciones y la amenaza del pesimismo no hay que resignarse, sino todo lo contrario. Hay que actuar con realismo y audacia en favor de la renovación institucional del país».

En la ceremonia, que estuvo presidida por el líder del PRI, Enrique Ochoa Reza, el funcionario resaltó que el gobierno de Peña Nieto «se ha enfrentado al reto de reconstruir el Estado mexicano tras el extravío que sufrió después de la primera transición democrática, cuando fue cooptado por poderes fácticos e intereses ajenos al bien común».

El Presidente, agregó, se ha enfrentado a este desafío con seriedad, serenidad, audacia y determinación.

«Con una gran visión y realismo ha sabido sobreponer el interés de México a los intereses particulares, más allá de coyunturas políticas o la búsqueda de popularidad», dijo.