A fin de eliminar el intermediarismo que hace que se encarezcan los cárnicos llegados al consumidor final, en el sector ganadero surge el clamor de revisar el contrato de concesión del rastro municipal a particulares, pues los productores pecuarios observan que debido al “coyotaje” rigen altos precios de la carne en el mercado, mientras los precios del ganado en pie están por los suelos.
El dirigente de la Asociación Ganadera Local, Marcial Santiago Vicente, informó que desde años anteriores se ha hecho la petición de municipalizar nuevamente el rastro que sea operado por el gremio ganadero, lo cual es necesario porque actualmente los introductores pagan precios irrisorios del ganado en pie.
Dijo que en el mercado se ofrece el kilo de carne en 120 y 130 pesos, mientras al productor que tiene que invertir en los insumos como son vacunas, desparasitantes y otros más, se le paga 36 pesos por kilo de novillo; becerra 32 pesos; las vacas entre 25 a 26 pesos.
De esa manera se advierte que los verdaderamente ganadores son los tablajeros y no los productores primarios, por lo que Marcial Santiago propone revisar la concesión del rastro y que sea administrado por ganaderos, y que para que haya beneficio para el consumidor, al momento en que baje el precio del ganado, también baje el costo de la carne en los mercados.
“Si nosotros manejáramos el rastro le pasaríamos directamente el ganado al tablajero y no se afecta a nadie”, dijo Marcial Santiago.