El Presidente Obama recibió en la Casa Blanca al Presidente electo Donald Trump.
La ceremonia de investidura de Donald Trump como el Presidente número 45 de Estados Unidos se desarrolla en el Capitolio.
Trump y Obama tomaron el té en la Casa Blanca.
El Presidente Obama recibió en la Casa Blanca al Presidente electo Donald Trump.
La ceremonia de investidura de Donald Trump como el Presidente número 45 de Estados Unidos se desarrolla en el Capitolio.
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Los actos en el Capitolio para la transferencia del poder y el comienzo del mandato de cuatro años del republicano Donald Trump comenzaron.
Se realizaron las lecturas religiosas a cargo del cardenal Timothy M. Dolan, el reverendo Samuel Rodríguez y la pastora Paula White-Cain.
En el acto, senador por Nueva York Chuck Schumer dijo en su discurso que lamentaba una política, frecuentemente consumido por el rencor.
Tras lo cual, el vicepresidente Mike Pence juró su cargo ante la biblia.
La ceremonia empezó con la presentación de los invitados ilustres, entre los que se cuentan también los ex Presidentes George W. Bush y Bill Clinton, junto a sus esposas Laura y Hillary, quien precisamente fue la rival de Trump en las elecciones del 8 de noviembre y salió derrotada por el magnate.
La ceremonia tiene lugar en las escalinatas del Congreso, frente a la inmensa explanada del National Mall, donde centenares de miles de simpatizantes del ganador de las elecciones de noviembre se congregan pese a una lluvia intermitente y el frío.
Trump fue recibido por sus simpatizantes con vítores y aplausos al llegar desde la cara oeste del Capitolio para jurar su cargo ante el juez y magistrado jefe del Tribunal Supremo, John Roberts, y con su mano derecha sobre la Biblia que usó el Presidente Abraham Lincoln en la asunción de la Presidencia.
En el escenario levantado para la ocasión se congrega la cúpula de los tres poderes del Estado, así como a la Primera Dama, Melania, la familia y allegados de Trump y el vicepresidente, Mike Pence.
No obstante, medio centenar de congresistas demócratas se negó a asistir a la solemne ceremonia en la que se escenifica la transferencia de poder.
Bandas militares amenizaron a los asistentes desde antes de empezar la ceremonia.
Previamente, el saliente Presidente de EU, Barack Obama, recibió en la Casa Blanca a su sucesor para tomar el té, en un hecho de tradición.
El Presidente saliente se despidió del Despacho Oval, donde pasó unos minutos apenas tres horas antes de entregar el cargo a su sucesor en la Casa Blanca.
Al salir por última vez del Despacho Oval como Presidente del país, Obama fue cuestionado por los periodistas sobre sus últimas palabras a los estadounidenses y su respuesta fue: «Gracias».
En el Despacho Oval dejó una nota personal para Trump.
Luego, los Obama y los Trump salieron juntos para recorrer cuatro kilómetros de la avenida Pennsylvania, rumbo a la ceremonia de juramentación, a los pies del Capitolio.
La lluvia puede atenuar la ceremonia y el desfile que se tiene programado.
Tras la ceremonia, los Obama tienen planeado viajar a Palm Spring, en California, para disfrutar de su primer día, como ciudadanos normales, luego de ocho años de ocupar la Casa Blanca.
Palm Springs, en el desierto del sur de California, ha sido un destino favorito de Obama para jugar golf.
