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EFE

Las reservas de petróleo de Estados Unidos subieron la semana pasada en 9.5 millones de barriles y se situaron en los 518.1 millones, informó hoy el Departamento de Energía.

Las existencias de crudo se encuentran cerca del límite máximo de la media para esta época del año, según las cifras oficiales.

Tras conocerse estos datos, el precio del barril de petróleo West Texas (WTI) para entrega en marzo bajaba un 0.24 por ciento, hasta 53.08 dólares.

Las importaciones diarias de crudo alcanzaron en la semana que terminó el 10 de febrero una media de 7.4 millones de barriles al día, un descenso de 1.3 millón de barriles respecto de la semana precedente.

La media de las últimas cuatro semanas en las importaciones de crudo se ubicó en 7.8 millones de barriles diarios, un 6.5 por cineto por encima del mismo periodo el pasado año.

Las reservas de gasolina para automoción subieron en 2.8 millones de barriles, hasta los 259.1 millones, y siguen en la banda más alta de la media histórica.

Por otro lado, las reservas de combustibles destilados, como el diesel y gasóleo de calefacción, bajaron en los 700 mil barriles de barriles.

Las refinerías operaron a un 85.4 por ciento de su capacidad instalada, por debajo del 87.7 por ciento de la semana anterior.

El total de existencias de crudo y productos refinados en Estados Unidos, incluida la Reserva Estratégica que permaneció estable en 695.1 millones de barriles, aumentó en 11.1 millones hasta los 2 mil 055 millones de barriles.

INFLACIÓN SUBE

El incremento estuvo impulsado por un alza del 4 por ciento en los precios de la energía, con un encarecimiento de la gasolina del 7.8 por ciento Foto: Cuartoscuro, archivo

El índice de precios al consumo (IPC) de Estados Unidos aumentó un 0.6 por ciento en enero, por encima de las expectativas, y la inflación interanual quedó en el 2.5 por ciento, informó hoy el Departamento de Trabajo.

La inflación en EE.UU. cerró el año 2016 en el 2,1 por ciento, la mayor tasa desde 2011.

El incremento del 0.6 por ciento  del IPC en enero fue el mayor mensual desde febrero de 2013 y estuvo impulsado por un alza del 4 por ciento en los precios de la energía, con un encarecimiento de la gasolina del 7.8 por ciento

En cuanto a los precios de los alimentos, subieron un 0. 1 por ciento en enero, tras haber permanecido invariables durante seis meses consecutivos, de acuerdo con el informe.

Sin tener en cuenta los precios de los alimentos y la energía, que son los más volátiles, el IPC subyacente registró el mes pasado un alza del 0.3 por ciento y el dato interanual quedó en el 2.3 por ciento, una décima por encima del informe previo.

Al cerrar el año pasado la inflación en el 2.1 por ciento, la tasa más alta desde 2011, se puso fin a un prolongado periodo de alza de precios inferior al 2 por ciento anual.