Hasta el martes, el número de diputados que tenía la fracción legislativa del PAN con la inclusión de José Luis Enríquez Ambell y Sebastián Reyes Arellano, era de 18 “suspiritos azules”. Súmele los cinco de la fracción del Sol Azteca, y tenemos 23 votos. Si a ello le agrega la posibilidad de que desde ya, Rodrigo García Escalante, fiel a su estirpe, salte del Verde ¡al Azul! son 24 votos… ¿quién falta para que la alianza panista y perredista sumen el 50% de votos y por qué tanto interés en ello?

II

Cuando Eva Cadena Sandoval fue “expulsada” del paraíso moreno, hubo dos fracciones que se interesaron en sumarla. Juntos por el Varo (Veracruz) y PAN.

A los primeros, el costo político parecía no interesarles si ello implica un voto más a sus cinco lo que le daría un plus a su valía legislativa. A los segundos, sí les importó el costo… fue menos doloroso el trance de Sebastián Reyes Arellano, en el que casi nadie chistó. Lo mismo ocurrió con José Luis Enríquez Ambell, quien con su salto de Independiente (que tenía Buganza) a blanquiazul, exhibe una de dos cosas: o no va a regresar Gerardo Buganza, o Buganza ya pintaba de “blue” pero si él se pasaba al PAN, sería crucificado, pero si Enríquez Ambell lo hacía, pasaría inadvertido porque no hay cola que le pisen… pero el asunto es sumar 25 y de ser posible, 26, pero dijera el Filósofo de Güémez: «Primero es el número 1 y después el 2; pero en el 21, el 2 se chingó al 1″… en pocas palabras, primero hay que alcanzar el 25… ¿con quién?

III

Vicente Benítez González fue llamado a “platicar”. Ha estado demasiado tranquilo, casi no hace ruido, se enconcha en su curul… ¡ni pío dice!

Eso sí, invierte mucho para que en Catemaco, junto con el alcalde Jorge González Azamar, gane “Huicha Domínguez”, María Luisa Domínguez Bucio, la esposa del edil.

Dicen, no me crea, no le piden que salte al PRD o al PAN… puede seguir en el Nueva Alianza pero su voto puede direccionarlo a favor del azul/amarillo.

La plática con Vicente Benítez pudiera haber concluido en buenos términos y será al tiempo cuando se vea qué tan convincentes son del lado azul. Por eso, en un momento dado, Vicente Benítez podría ser el número 25.

El asunto podría pintar de maravilla de no ser por el rumor que se dejó correr de que Cinthya Lobato Calderón dejaría la bancada panista para volverse independiente.

No deja de ser rumor y si no mal recuerdo, en reunión con el Grupo de los 10, se le hizo esta pregunta: Si dejaría el PAN, y ella respondió que no. Un respiro, pero a la vez no, porque el hecho de que se mantenga en la fracción no implica que vote a favor.

¿El 26? Ya es tarea más fácil.

IV

Qué busca el PAN con tanto alboroto por sumar diputados a la fracción: lo que Juntos por el Varo, Morena, PRI o cualquier otro partido quisiera: Poder y Control.

Recuerden que al PAN le corresponden 10 meses al frente de la Junta de Coordinación Política y por agosto, el turno sería para Morena por ocho meses; cierra el periodo Juan Nicolás Callejas Roldán, del PRI, por seis meses… pero si la fracción panista (con la del PRD) fueran mayoría (25+1) existe la posibilidad de que la Jucopo la asuma de nuevo, o al menos los tres últimos meses de lo que es el periodo de la LXIV Legislatura.

Por supuesto, eso ya lo saben Amado Cruz Malpica, Callejas Roldán y Fernando Kuri, quienes ya han reclamado en más de una ocasión el juego de ajedrez que maneja Sergio Hernández Hernández que a como van las cosas, los trae en jaque. Al tiempo.

smcainito@nullgmail.com