Un joven llegó al Río Sacramento, en Chihuahua, el fin de semana, con su tigre atado a una fina cadena. La gente se acercó para admirarlo, aunque algunos advertían del peligro.
El dueño del animal exótico se metió al agua, a donde el felino se mantuvo en calma; hasta que el paseador y supuesto dueño comenzó a lanzarle agua.
El video que circula en redes sociales muestra cómo en ese momento, el tigre se inquieta hasta que soltarse y correr hacia donde estaba la gente, que estalla en exclamaciones de asombro.
La Policía Municipal de Chihuahua y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) investigan el caso, pues aunque no hubo reporte a las autoridades locales; se tiene que corroborar que tengan los documentos legales para la propiedad del felino que ahora es famoso en redes.