El Presidente estadounidense Donald Trump le advirtió el jueves a Corea del Norte que “guarde la compostura” o estará en problemas “como pocas naciones lo han estado”.
El mandatario expresó que quizás su comentario anterior sobre la posibilidad de desatar “fuego y furia” sobre los norcoreanos no fue suficiente.
A Corea del Norte “más le vale que guarde la compostura o estará en problemas como pocas naciones lo han estado”, dijo el Presidente a reporteros en su club de golf de Nueva Jersey, donde está de vacaciones.
Horas antes Corea del Norte había anunciado un detallado plan para lanzar una salva de misiles balísticos hacia Guam, un territorio estadounidense en el Pacífico que sirve de centro militar y base para bombarderos. De llevarse a cabo, sería el ensayo más provocador de Pyongyang hasta la fecha.
El anuncio advirtió que Pyongyang está preparando un plan para disparar cuatro de sus misiles Hwasong-12 sobre Japón a aguas próximas a la pequeña isla, que acoge a 7 mil soldados estadounidenses en dos bases. La población total de la isla es de 160 mil personas.
Japón y Corea del Sur prometieron una contundente reacción si Corea del Norte sigue adelante con su plan.
El plan, que consiste en lanzar misiles para que caigan al mar a 30 a 40 kilómetros de la isla, sería enviado al líder Kim Jong Un para su aprobación en la próxima semana, y dependería de éste que se lleve a cabo o no, según el anuncio.
No está claro _o exactamente por qué_ Corea del Norte se arriesgaría a lanzar misiles a un lugar tan cercano al territorio estadounidense. El lanzamiento prácticamente obligaría a Washington a intentar interceptarlos, lo cual podría generar una escalada mayor.
Corea del Norte suele utilizar una retórica extremadamente belicosa junto con advertencias de medidas militares para mantener en alerta a sus adversarios. Generalmente dice que no atacará a Estados Unidos salvo que éste ataque primero o haya determinado que el ataque es inminente.
Pero en este caso hubo amenazas de ambas partes.
Ante informes de la inteligencia estadounidense de que el Norte estaría en condiciones de acoplar una ojiva nuclear a un misil capaz de alcanzar blancos en territorio continental estadounidense, el presidente Trumpamenazó a Pyongyang con “represalias de fuego y furia como el mundo nunca ha visto”.
El plan norcoreano que ha trascendido es sumamente concreto, indicio de que en verdad podría estar calculando un lanzamiento.