El terrorismo yihadista ha golpeado en España por segunda vez desde 2004 con un atentado en las Ramblas de Barcelona en el que los autores irrumpieron con una furgoneta en la zona peatonal donde asesinaron a 14 personas e hirieron a casi un centenar y horas después cinco terroristas fueron abatidos de madrugada por la policía en Cambrils (Tarragona).
Entre las víctimas en las Ramblas hay menores de edad y de nacionalidad española, francesa, alemana, holandesa, argentina, venezolana, belga, peruana, rumana, irlandesa, cubana, griega, macedonia, británica, austríaca, paquistaní, taiwanesa, canadiense, ecuatoriana, estadounidense, filipina, kuwaití, turca y china.
En una operación policial posterior murieron cinco terroristas que llevaban cinturones, que aparentaban ser explosivos, tras lanzar en la localidad tarraconense de Cambrils, en el sur de Cataluña, otro ataque con un vehículo contra los viandantes junto al paseo marítimo.
Los Mossos d’Esquadra (Policía autonómica catalana) informaron de que los terroristas arrollaron con su vehículo a varias personas en esa localidad costera del noreste español, donde seis personas fueron heridas y una de ellas está en estado crítico.
Tras el atentado, los policías autonómicos interceptaron a los terroristas en el vehículo en el que huían por el Paseo Marítimo y que volcó en una rotonda próxima al club náutico al toparse con el control policial.
En el intento de huida comenzó el tiroteo en el que cuatro terroristas resultaron muertos y un quinto herido, aunque falleció poco después.
Los Mossos investigan la conexión entre los atentados de Barcelona y Cambrils, así como con la explosión registrada la víspera de madrugada en una vivienda de la localidad de Alcanar, también en la provincia de Tarragona.
El Estado Islámico, a través de su órgano de propaganda digital Amaq, reivindicó la autoría del atentado en la capital catalana, y uno de cuyos autores, supuestamente el conductor de la furgoneta que ha embestido a un centenar de ciudadanos en la Rambla, permanece huido.
El comandante de los Mossos d’Esquadra, Josep Lluis Trapero, informó en rueda de prensa que el atentado de Barcelona tiene conexiones “claras” con esa explosión de Alcanar.
Los inquilinos de esa casa, ahora derruida, preparaban en su interior explosivos con varias bombonas de butano.
Uno de los detenidos es natural de Melilla, ciudad española del norte de África, y el otro sería la persona que supuestamente alquiló en la localidad barcelonesa de Santa Perpetua de la Mogoda la furgoneta del atropello masivo en Las Ramblas.
Las fuerzas y cuerpos de seguridad intentan localizar al joven de origen marroquí identificado como Driss Oukabir, cuya foto ha sido distribuida por la Policía para facilitar su detención.
Oukabir llevaba cinco años en España y disponía del documento de residencia.
El atentado de Barcelona ocurrió sobre las 17.00 horas de ayer (15.00 GMT), cuando la popular arteria barcelonesa estaba muy concurrida por los turistas, momento en que una furgoneta de color blanco arrolló a gran velocidad a la multitud de viandantes y sembró un reguero de víctimas.
Minutos después de la embestida, los Mossos d’Esquadra activaron el despliegue para cerrar el centro de Barcelona mediante la Operación Jaula en las salidas de la ciudad, en la que se vieron atrapados durante horas miles de conductores.
Los agentes interrumpieron también el transporte público y pidieron a los ciudadanos y turistas que no transitaran por las zonas céntricas.
En la operación antiterrorista fue localizado un segundo vehículo sospechoso en el municipio barcelonés de Vic (Barcelona).
El presidente del Gobierno autonómico de Cataluña, Carles Puigdemont, encabezó un comité de crisis al que asistió la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, mientras el presidente del Gobierno español interrumpió sus vacaciones en Galicia (noroeste) y viajó a Barcelona.
Hoy está prevista una concentración en la plaza de Cataluña, en Barcelona, con los dirigentes de las principales fuerzas políticas españolas en repulsa por el atentado y solidaridad con las víctimas.
Felipe VI, rey de España, condenó el atentado en un mensaje en su cuenta oficial de Twitter donde afirma que los autores: “Son unos asesinos, simplemente unos criminales que no nos van a aterrorizar”.
El jefe del Gobierno español indicó que “la primera prioridad” son las víctimas y apeló a la solidaridad de toda España con Barcelona y la unidad para doblegar al terrorismo.
El Ejecutivo español, anunció Rajoy, convocará el pacto contra el yihadismo en el que participan las principales fuerzas políticas.
Además ha decretado tres días de luto oficial.
Hoy serán numerosos los actos de solidaridad pues ya han sido convocadas concentraciones y minutos de silencio en infinidad de lugares de España.
Desde el exterior se han sucedido las muestras de solidaridad y en mensajes oficiales dirigentes como la canciller alemana, Angela Merkel, o el presidente francés, Emmanuel Macron, trasladaron su pesar y solidaridad
Numerosos mandatarios latinoamericanos mostraron su apoyo a España al igual que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien ofreció ayuda en la investigación y pidió a los españoles ser “duros y fuertes” en la lucha contra el terrorismo.
Los trabajadores de la empresa de seguridad privada del aeropuerto barcelonés de El Prat suspendieron la huelga indefinida que mantenían.
