*No estoy aceptando las cosas que no puedo cambiar, estoy cambiando las cosas que no puedo aceptar. Camelot.

LA CUMBRE TAJIN DE YUNES

Publicita el gobierno de Yunes Linares, la edición 2018 de Cumbre Tajín. Del 16 al 20 de marzo, en Papantla, llamada “El brillo de la memoria”. Un evento que inició o Dante o Miguel Alemán, mi coco anda en versión no me acuerdo, voy a Wikipedia: “Su primera edición fue en el inicio de la primavera del año 2000 y se realiza alrededor del equinoccio de primavera en el Parque Temático Takilhsukut, la Zona Arqueológica de El Tajín (que comprende 1.5 km cuadrados) y el zócalo de Papantla, donde se desarrollan: ceremonias, talleres, rituales, terapias alternativas, juegos autóctonos, conciertos, danzas, actos circenses, conferencias, exposiciones y proyecciones”. Me turbé porque recordé que Dante Delgado Rannauro, el dueño de los pensamientos del niño Colosio, llevó una caravana, fletando un avión de Taesa, a los radiodifusores que allí en Veracruz, en San Juan de Ulúa, les hizo una cena perrona con suculentos manjares y decimeros, por eso mi turbación aclarada. Quien esto escribe la visitó una sola vez. Fue cuando de jefe de Prensa estaba al frente, Sabás Huesca Rebolledo, al lado de Gilberto Martínez, su segundo de a bordo, tiempo de Miguel Alemán Velasco. Cesado y perseguido y encarcelado. Cambio que dio paso a que llegara un excelente comunicador, Raúl Peimbert Díaz, a tapar esos agujeros y esas relaciones que se fueron convirtiendo en malas, pero que a muchos de los reporteros, editores y periodistas veracruzanos, hablaban bien de Sabás. Llegué y de lo que me acuerdo es de ese bello centro ceremonial, de los mundialmente famosos voladores de Papantla, entre el calor perrísimo me hice una de las limpias que ejecutan los indígenas, para que los malos espíritus abandonaran mi cuenqueño y jodido cuerpo. Fui un par de días. Hace añisimos que no visito esa zona, tantos como dos sexenios y lo que va de este, la vida a veces se mide por sexenios, pero vale la pena que vayan, es un evento único, y a Yunes Linares, el ahora constructor de carreteras y de obras públicas, le tocará por su última vez. La próxima, dicen los panistas, le va a tocar al hijo gobernador.

LA DE CHICAGO.

Otra vez, representando a diario Crónica de Tierra Blanca y a la XEJF Radio, también fui invitado a Chicago, la ciudad de los vientos, un octubre del año 2000, ha llovido ya. Sucede que el gobernador de las estrellas iba a entregar una cabeza Olmeca, en Chicago, como otras ocho replicas que donó al mundo, hechas por el maestro escultor, Ignacio Pérez Solano, una de ellas, imagínense, a quien era jefe de gobierno del DF, un hombre llamado Andrés Manuel López Obrador. Alemán también donó, eso lo vi con mis propios ojos, un busto del gran Agustín Lara, que está situado en la Habana, Cuba. Miguel Alemán ha sido una gente de respeto. Amigo de Sinatra y de Henry Kissinger y de Rockefeller, y a ratos de Montano, paseaba por el mundo su fama de haber sido hijo de un civilista presidente, Miguel Alemán Valdés, y estar casado con doña Christiane Magnani, una mujer bellísima, compañera de su vida, mujer que se adaptó a nuestra tierra y formaron una extraordinaria familia muy mexicana y francesa, educados todos. Pero esa es otra historia que un día cuento, cuando a Chicago llegamos ya, y llegamos bailando el son jarocho y el Cielito lindo, donde se anidan los corazones, el ay, ay, canta y no llores.

AMARRAR AL TIGRE

El ruso Andrelovitch, ante los banqueros de México, donde una mal puesta guayabera le hacía exhibir y ver su ombligo tabasqueño, lo que sirvió para varios memes en las redes sociales, les expresó que él no les va a expropiar nada, ni les quitará sus casas ni sus bancos ni sus panzas gordas, ni sus sueños, nada. A los banqueros hay que seguirles. Lo dice una vieja consigna: “Si ves saltar a un banquero por una ventana de un edificio de 10 pisos, salta tras él, algo habrá de aquel lado”. Ante los hombres del billete verde, el casi venezolano-ruso-tabasqueño, acusado de ser otro Maduro, candidato de Morena, navega como puntero en las elecciones presidenciales. López Obrador les dijo a los banqueros que si las elecciones se pierden, se va a Chiapas, a Palenque. Pero si son por fraude, también se va pero, “a ver quién amarra al Tigre”. Eso de amarrar al tigre data de hace años, es milenario el cuento del zorro y el tigre, y hay fábulas de ellos.

En cierta ocasión un tigre se iba a comer a un zorro. Entre los dientes, el zorro le propuso no lo matara. Porque él era el verdadero Rey de la selva y le propuso lo soltara y caminara cuatro pasos atrás de él, para que viera cómo le temían todos los animales de la selva. Así lo hizo y el tigre admiraba cómo corrían espantados esos animales, sin entender que era a él al que le huían.

Moraleja: La inteligencia y la astucia son más importantes que la fuerza. Nunca pienses que una persona, por ser más pequeña o aparentemente más débil, es menos válida que tú.

¡El tigre no se lo podía creer! ¡Era cierto que ese pequeño zorro era un auténtico jefe y que causaba temor sobre el resto de animales!