* ¿Tarjeta amarilla a EPN?

Buen día apreciado lector:
Vaya sorpresivo y muy coloquial discurso el de ayer del gobernador Miguel Angel Yunes Linares, quien a leguas se nota la lleva bien con el visitante. Si bien no cimbró a México, lo hizo reir, casi a carcajadas, a pesar de que está en juego el futuro del país.
Pero así son los políticos.
En la visita que hizo ayer a la Entidad el Presidente de la República Enrique Peña Nieto, para inaugurar un importante granelero de Diconsa en el frío y nostálgico Valle de Perote, ambos utilizaron la retórica, ambos invocaron a Dios y los ciudadanos esperaremos a que Dios ya permita que los mexicanos y los veracruzanos tengamos un mejor futuro y que el próximo primero de julio, el que ría al último lo haga mejor.
En plena etapa electoral, este encuentro seguramente algo provocará y hará que los analistas, columnistas y observadores del altiplano volteen hacia lo que se dijo ayer al pie del Cofre de Perote, entre el mandatario veracruzano y el Presidente de la República, a tres meses y feria de la elección histórica que se avecina.
Acostumbrados por generaciones a escuchar gobernantes pronunciar discursos a medias, no deja de sorprender que en plena etapa de «silencio electoral». ante el Presidente de la República, de acuerdo a su estilo entrón, el gobernador en turno haya utilizado un lenguaje muy entendible para expresar una definición sui géneris de los candidatos a relevar a Peña Nieto y pintar su raya contra el aspirante presidencial de Morena.
Centró su discurso con obvias alusiones al morenista y aseguró que el pueblo veracruzano no votará «contra quien se asume como el domador insustituíble y amenaza soltar a los tigres si no gana la elección.
VILLA ALDAMA NO SERÁ MONASTERIO.
Miguel Angel añadió que «tampoco votarán los veracruzanos por quien ofrece el perdón de los delitos como si estos fueran pecado y no agravios contra las personas y la sociedad. Hasta donde sabemos, solo Dios puede perdonar y Dios no ha obtenido su registro en el INE, como candidato a la Presidencia de la República.
Y enseguida con gran ironía continuó: «Aquí, apenas a veinte kilómetros se encuentra el penal federal de Villa Aldama, donde miles de peligrosos delincuentes compurgan sus penas. No se abrirán las puertas del penal, allí tienen que seguir los delincuentes, el penal seguirá siendo penal, no se convertirá en monasterio».
Luego comentó que los veracruzanos votarán, entre otras cosas, «por quien no ponga en riesgo la estabilidad política y económica de México».
Peña Nieto respondió que sin mirar el origen partidario de ambos gobiernos, el suyo seguirá apoyando a todas las entidades y categórico, afirmó que los mexicanos decidirán libremente su voto.
Pero sí le aclaró a Miguel que ambos piensan en candidatos distintos, «se vale» comentó, para asegurar que «estos atributos él los ve en uno yo los veo en otro y ustedes lo saben».
De plano confesó: «Yo los veo en uno. Y sólo en uno. Pero como el INE nos va a sacar tarjeta amarilla, cada mexicano que decida libremente. Este gobierno será absolutamente respetuoso de la definición y de la decisión que de manera mayoritaria tomen los mexicanos», reiteró.
Tenga el lector un día de paz y armonía en su hogar.
gustavocadenamathey@nullhotmail.com