Manuel Negrete nunca imaginó que su famoso gol de media volea frente a Bulgaria, en el partido de octavos de final del Mundial de México 1986, “llegara a trascender tanto y después de mucho tiempo, creo que hasta hoy, después de 32 años de haberlo hecho, apenas me está cayendo el 20 de lo que realmente significó”.
La espectacular anotación que el futbolista mexicano anotó al minuto 34 de dicho encuentro disputado en el estadio Azteca, fue elegida como la mejor en la historia del certamen tras superar en unas votaciones convocadas por la FIFA al gol que Éder marcó desde fuera del área para sellar la victoria de Brasil ante la URSS, en la fase de grupos de España 1982.
“Para mí fue sólo un gol, aunque claro, fue muy significativo porque nos permitió avanzar a la siguiente ronda de aquél Mundial, pero en ese momento así lo tomé, como una anotación más.
“Claro que estaba emocionado, contento, muy ilusionado con ser campeón del mundo, porque era un partido que ganamos (2-1), aunque seguía Alemania, sin embargo, teníamos el compromiso y la responsabilidad de seguir dando lo mejor.
“Nunca me dieron un premio económico por él ni nada, pero mi mayor satisfacción es la alegría, la euforia que en ese momento le causé a la afición. Lo disfruté en aquél entonces y hoy lo sigo haciendo cada que platico con la gente que lo recuerda con mucho cariño”, declaró el ex seleccionado nacional en entrevista con La Jornada.
El gol de Negrete compitió en la votación de la FIFA contra otras 31 anotaciones, entre ellas, el cabezazo de su compatriota Jared Borgetti frente a Italia, un tanto de Maradona ante Inglaterra, otro de Pelé ante Suecia, entre otros.
El ex jugador de los Pumas superó al gol del argentino Maxi Rodríguez en los octavos de final de la competencia de la FIFA, al del holandés Dennis Bergkamp en cuartos de final, al del colombiano James Rodríguez en semifinales, y al del brasileño en la final.
