«El primer debate es como la presentación en sociedad de los candidatos presidenciales, pero si en el segundo no logran tumbar al puntero, ya no va a haber forma que lo alcancen porque cuando se realice el último, faltarán tres semanas para que se realice la elección». Lo afirmó Rey Campos, en entrevista, y añadió que «históricamente en un debate presidencial los punteros tienden a disminuir en la preferencia electoral de los votantes; sin embargo no se puede prever que ello le sucederá a López Obrador, pues esta campaña no está demostrando un comportamiento similar a otras». La nota es de «El Economista».